Si eres nuevo en el mundo de la blockchain, la idea de intentar invertir en criptomonedas como Bitcoin y Ethereum puede parecer abrumadora.

Pero no temas, estamos aquí para ayudarte a entender cómo invertir. En esta serie, en asociación con AAX, la primera Plataforma de intercambio de activos digitales del mundo impulsada por la Bolsa de valores de Londres, te llevaremos desde lo más básico hasta lo mas alto.

Te mostraremos el panorama de la inversión, los diferentes tipos de inversiones y cuáles son los riesgos y recompensas de elegir diferentes herramientas para invertir en criptomonedas.

Pero antes, empecemos por lo básico.

Invertir en criptomonedas

En su forma más simple, la compra de criptomonedas es como la compra de cualquier otro bien: te encuentras un corredor o una Plataforma de intercambio, se acuerda un precio, y ese activo se envía y se guarda en tu cuenta. La esperanza es que el valor de ese activo aumente con el tiempo y que lo vendas a un precio mayor.

Con las criptomonedas no es diferente. Pero si vienes del mundo del dinero tradicional, en el que puedes haber invertido en cosas como cuentas de ahorro invidual y pensiones, el rendimiento de estos activos es muy diferente.

Por ejemplo, si tienes una cuenta de ahorro, con las tasas de interés tan bajos en la mayoría de los países occidentales, el rendimiento de esos ahorros sería de unos pocos puntos porcentuales al año.

Si inviertes en Bitcoin, dependiendo del momento en el que inviertas podría estar muy arriba o muy abajo en poco tiempo. En el último año, la volatilidad ha sido tan alta como el 10%, y tan baja como el 1,5%.

A modo de comparación, la volatilidad del oro ronda el 1,2% de media, mientras que la de otras divisas importantes oscila entre el 0,5% y el 1,0%.

Por ello, la inversión en criptomonedas debe considerarse como parte de una cartera equilibrada que contenga una combinación de activos con diferentes perfiles de riesgo.

Si te interesa saber por qué el Bitcoin es tan volátil, tenemos un artículo sobre eso, aquí.

Ahora que hemos aclarado esto, vamos a profundizar en los diferentes tipos de criptomonedas.

Los diferentes tipos de criptomoneda

Si miras las mayores criptomonedas por capitalización de mercado—el valor de todas las monedas en circulación multiplicado por el precio actual—verás toda una serie de proyectos diferentes que utilizan tokens para diferentes cosas.

Así que verás Bitcoin, que es una criptomoneda que puede utilizarse como depósito de valor, medio de intercambio o unidad de cuenta. Esta idea ha sido debatida durante mucho tiempo, y lo cubrimos aquí.

Dado que Bitcoin es de código abierto, hay cientos de monedas que utilizan el mismo código en el que se basa Bitcoin. Algunos ejemplos populares son Bitcoin Cash, Litecoin y Bitcoin SV. Pero no son lo mismo que Bitcoin. Tienen diferentes tokens, diferentes comunidades, y diferentes características que las comunidades vinculadas a ellos pueden haber añadido .

Otro tipo de criptomoneda muy popular, especialmente entre los inversionistas, son las stablecoins. Se trata de monedas vinculadas al valor de algo más, normalmente el dólar estadounidense. Algunos ejemplos son Tether, DAI y USDC.

La razón por la que son populares entre los inversionistas es que a menudo son vistos como una rampa de entrada estable a la criptomoneda, y a menudo son desarrollados y desplegados por empresas reguladas por las autoridades financieras. Lo que se compra por un dólar, se mantiene a ese precio (en general).

Además, tenemos los tokens de utilidad, que son esencialmente pequeñas porciones de un producto. Uno de los más famosos es Filecoin, su token FIL proporciona a los usuarios una forma de acceder a su almacenamiento descentralizado. También hay cientos de tokens de utilidad construidos sobre Ethereum. El precio de los tokens de utilidad tiende a fluctuar en relación con el uso que se hace de ese token para su propósito.

También hay tokens de valores, pero como la definición de estos tokens no es una distinción legal, sino técnica, no entraremos en demasiados detalles.

Hay toda una serie de otras definiciones: monedas de privacidad, monedas meme, tokens de gobernanza, y la lista continúa. Pero a estas alturas, lo importante es señalar que el valor de estos tokens, y a su vez lo que influye en ese valor, proviene de diferentes fuentes.

Algunos tokens verán incrementado su valor cuando las plataformas de intercambio decidan ofrecerlos como par comercial con un token más conocido, como el Bitcoin. Otros tokens suben—y bajan—de valor cuando los proyectos que los gestionan anuncian o cambian sus características. Algunos responderán a los titulares de las noticias, y otros podrían estar siendo manipulados por grupos organizados que utilizan la red para inflar el valor y así poder vender los tokens con ganancias.

Una de las ideas centrales que hay que tener en cuenta cuando se trata de invertir en criptomonedas es que la comunidad es relativamente pequeña, al igual que el dinero que contienen, especialmente cuando se ponen las criptomonedas al lado de otras clases de activos, que tienen un valor colectivo de $256 billones de dólares.

Esto significa que cuando se produce una noticia, o un movimiento de criptomoneda de un token a otro, los efectos de esos movimientos son a menudo mayores de lo que se vería en otras clases de activos. Piense en ello como si se dejara caer un gran guijarro en un pequeño estanque. Habrá ondas.

¿En qué debes pensar al momento de elegir en que invertir?

En primer lugar, antes de invertir en criptomoneds es importante entender tu apetito por el riesgo. Aunque en 2020 la volatilidad del Bitcoin se ha estabilizado, sigue siendo muy superior a la de otras clases de activos y acciones.

Pero la buena noticia es que los niveles de sofisticación en torno a la inversión en criptomonedas han aumentado considerablemente en los últimos 12 meses.

Mientras que muchos inversionistas en criptomonedas optan por invertir y conservar una sola criptomoneda en su portafolio, ahora hay productos y servicios institucionales de grado de inversión que pueden protegerte de la exposición directa al rendimiento de un activo, cubrir el rendimiento de una criptomoneda con otra, e incluso permitirte ganar intereses por participar en una red, algo que exploraremos en la segunda parte de nuestra guía de inversión.

¿Te sientes cómodo? Estás listo para dar tu primer paso. Dirígete a AAX, donde puedes hacer tu primera compra y comenzar tu viaje a la criptomoneda utilizando la función FastBuy.

Descargo de responsabilidad:

Los puntos de vista y las opiniones expresadas por el autor tienen únicamente fines informativos y no constituyen asesoramiento financiero, de inversión o de otro tipo.