In brief
- El artista Tom Ford dijo que no le presta atención a la jerga de la Web3 pues los términos están contaminados.
- Asegura que le interesa más explorar los usos de la blockchain para ampliar su proceso creativo.
- Esta visión parece ser compartida por varios en la industria, incluido el Museo LACMa que recientemente se negó a usar el nombre NFT para una colección de "arte on chain".
Cuando se trata del mundo de las criptomonedas, al renombrado artista Tom Sachs no le interesa que la etiqueta Web3 sea global, ni ciertos términos como cripto o NFT también sean conocidos mundialmente.
"No me interesan tanto esas palabras", dijo a Decrypt. "Creo que están -en muchos sentidos- envenenadas".
El escultor -cuyas obras de arte contemporáneo se exhiben en museos y galerías de todo el mundo- dijo que está más centrado en cómo los artistas del espacio están aprovechando la tecnología blockchain para aumentar su proceso creativo.
Artist @tom_sachs of @tsrocketfactory sat down with us at @nft_paris: "I'm not so interested in words like 'crypto' and 'NFT.' I think they're in a lot of ways poisoned. But what I am interested in is utility and guidelines and structure." pic.twitter.com/MF739FOH8j
— Decrypt (@decryptmedia) February 25, 2023
"Me interesa la gente de este espacio que busca ampliar sus valores de las cosas que ya les interesan y utilizar esta Web3 como una herramienta más", afirmó.
Los NFT (tokens digitales únicos que significan la propiedad de un artículo, a menudo arte digital) son un elemento central de Rocket Factory de Sachs, una plataforma en la que se compran y venden componentes digitales de cohetes con las características de marcas comunes como Coca-Cola y Budweiser.
El año pasado, Budweiser compró el cohete con la marca de cerveza de Sachs por ocho Ethereum y cambió temporalmente su foto de perfil en Twitter por la obra de arte. Sachs describió la inclusión de la empresa como parte de un comentario sobre el consumismo.
"Podrías definirte a ti mismo a través de las cosas que consumes", dijo Sachs en referencia al proyecto. "Las 30 marcas que elegimos para Rocket Factory son las marcas que me definen: es una especie de autorretrato".
El proyecto permite a sus participantes ensamblar estos componentes para crear un cohete completo, una obra de arte digital totalmente nueva. Y este Cohete Completado puede lanzarse y recuperarse en forma de escultura, donde el NFT se actualiza con información sobre el esfuerzo, como vídeo y metadatos.
Sachs describe el uso de NFT por los artistas como un movimiento de base, en el que ha aprendido de la gente de la comunidad Web3.
"Nuestros amigos han sido nuestros maestros", dijo Sachs. "He aprendido a navegar por este espacio a través de la gente y, a su vez, he enseñado a otros".
A medida que los NFT han ido ganando adeptos en el mundo del arte, numerosos museos los han incorporado a sus colecciones, como el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles (LACMA), que recientemente incorporó 22 obras de arte digital tokenizadas del coleccionista seudónimo Cozomo de' Medici.
El anuncio del LACMA refleja los comentarios de Sachs sobre los términos de Web3 de alguna manera, ya que el museo evitó el término NFT al hablar del arte, optando por referirse a los NFT que aceptó recientemente como "arte blockchain" o "arte on-chain."
Antes de su reciente incorporación, el LACMA ya albergaba otras formas de arte digital, entre ellas un NFT de Rocket Factory de Sachs.
En una entrevista con Joel Ferree, director del programa Art + Technology Lab del LACMA, Sachs comentó algunas de las ventajas de la tecnología para crear nuevas formas de arte.
"Lo que me entusiasma de los NFT es que las reglas, los límites, son transparentes y concretos en toda la blockchain", dijo Sachs. "Nadie es dueño de la información, y puedes ver las huellas digitales de todos los que estuvieron allí antes que tú".