China se ha manifestado una y otra vez contra las criptomonedas a lo largo de los años, y en 2021 intensificó sus esfuerzos al tomar medidas contra la minería de Bitcoin. ¿Pero qué pasa con los NFT? Un nuevo informe del país sugiere ahora que China estrenará su propia plataforma gubernamental para el lanzamiento de este tipo de coleccionables digitales tokenizados, sin que se permita el uso de criptomonedas.

El South China Morning Post informó esta semana de que la Red de Servicios Blockchain (BSN), respaldada por el Estado, está preparando una infraestructura blockchain autorizada y no pública que permitirá el lanzamiento de coleccionables del tipo NFT bajo la atenta mirada del Gobierno.

Según el informe, la plataforma no será interoperable con los NFT creados en redes públicas de blockchain como Ethereum y Solana, y no aceptará pagos en criptomoneda. En su lugar, la red privada aceptará exclusivamente el yuan chino para pagar los objetos de colección y las tarifas de la plataforma.

BSN utilizará el término Certificado Digital Distribuido (DDC) para referirse a su marca única de NFT respaldada por el Estado, según el informe, y la plataforma se lanzará a finales de este mes.

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He Yifan, director general de Red Date Technology -que es una de las empresas tecnológicas que están detrás de los BSN- dijo a la publicación que estos coleccionables "no tienen ningún problema legal en China" siempre que no estén asociados a las criptomonedas. Añadió que las blockchains públicas "son ilegales" en China, debido a las regulaciones gubernamentales.

BSN ha creado previamente versiones especialmente autorizadas de las redes blockchain existentes para uso corporativo, e integrará 10 de ellas en su plataforma NFT, incluyendo versiones de Ethereum y Corda, según el informe.

Según se informa, la empresa ha reclutado a 20 socios para el próximo lanzamiento, entre ellos la red de blockchain Cosmos, el proveedor de facturación en la nube Baiwang y la empresa de soluciones de radiodifusión Sumavision.

Una NFT actúa como una escritura de propiedad de un elemento digital, como una imagen, un videoclip, un elemento de videojuego, etc. El mercado de NFT generó 23.000 millones de dólares en volumen de operaciones en el transcurso de 2021, según datos de DappRadar, un aumento espectacular desde los 100 millones de dólares de 2020.

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Por qué es importante

Dada la postura del gobierno chino sobre las criptomonedas, no es de extrañar que las empresas del país hayan jugado a lo seguro con las NFT hasta ahora. En un informe separado esta semana, el South China Morning Post escribió que, en medio de la creciente demanda de NFT en China, las empresas han comenzado a llamarlos "coleccionables digitales" y están evitando en gran medida la marca NFT.

Además, las empresas que venden coleccionables digitales tokenizados no pueden permitir su reventa, debido al temor del gobierno a la especulación y al blanqueo de dinero. Aun así, empresas como Alibaba, Tencent, Bilibili y JD.com han lanzado sus propios coleccionables digitales.

El plan del gobierno de mantener el mercado de NFT bajo su vigilancia a través del uso de la tecnología blockchain autorizada, suena acertado, dada su postura sobre las criptomonedas. Con este enfoque, sigue proporcionando a los ciudadanos acceso a activos digitales que pueden poseer y utilizar, pero aparentemente evita el frenesí especulativo que ha surgido en torno a las verdaderas NFT.

Sin embargo, uno de los grandes atractivos de los NFT es que no están controlados por una entidad centralizada. Pueden comprarse y venderse libremente sin necesidad de permisos, y también son potencialmente interoperables, lo que hace que puedan utilizarse en distintas plataformas y mundos en línea, un punto de venta clave a medida que el inminente metaverso va tomando forma.

En China, si el marco de la BSN para los coleccionables DDC se consolida, los usuarios podrían no tener los mismos derechos y capacidades. Y al igual que otras industrias tecnológicas y de entretenimiento en China, en particular los mercados de los videojuegos y el cine, la estricta supervisión china puede limitar el acceso de los ciudadanos y dejar fuera a gran parte del mundo de su considerable base de usuarios potenciales.

También podría limitar el potencial de la industria NFT para globalizarse de verdad y aprovechar los 1.400 millones de ciudadanos de China. Asimismo, puede obstaculizar el potencial de un metaverso abierto, interoperable e impulsado por la NFT para conectar plenamente a la población mundial.

Las empresas chinas están invirtiendo en el metaverso, a pesar de las advertencias de los medios de comunicación estatales. Sin embargo, la postura del gobierno respecto a las NFT podría influir en última instancia en su visión del metaverso venidero y generar otro jardín amurallado como resultado.

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