La Reserva Federal y otros dos reguladores estadounidenses han lanzado hoy una advertencia a los bancos sobre las criptomonedas.

En un comunicado conjunto, la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal, la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) y la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC) señalaron que los bancos deben ser conscientes de la "significativa volatilidad y vulnerabilidad" que ha experimentado este año el sector de las criptomonedas.

Los reguladores añadieron que los bancos con exposición a las criptomonedas podrían estar especialmente en riesgo. Los llamados "challenger banks", o instituciones financieras de nueva generación, han comenzado a ofrecer servicios de activos digitales en todo el mundo.

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"Sobre la base de la comprensión actual de las agencias y la experiencia hasta la fecha, las agencias creen que emitir o mantener como principales criptoactivos que se emiten, almacenan o transfieren en una red abierta, pública y / o descentralizada o un sistema similar es muy probable que sea incompatible con las prácticas bancarias seguras y sólidas", dice la declaración del lunes.

La declaración conjunta se produce en un momento en que los políticos estadounidenses presionan a los reguladores para que el sector de los activos digitales sea más transparente, tras la quiebra en noviembre de la mega exchange FTX.

Las senadoras demócratas Elizabeth Warren de Massachusetts y Tina Smith de Minnesota pidieron el mes pasado al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, información sobre los vínculos de los bancos estadounidenses con las criptomonedas tras el colapso del criptointercambio FTX.

Las políticas expresaron su preocupación porque Alameda Research, la empresa hermana de FTX, invirtió 11,5 millones de dólares en el banco Moonstone, con sede en Washington, y otros bancos estadounidenses estaban experimentando una "mayor volatilidad" debido a las inversiones en cripto.

La regulación de las criptomonedas en Estados Unidos también es un tema candente tras la quiebra de FTX, ya que muchos clientes estadounidenses habían utilizado los servicios de la empresa, a pesar de que ésta tenía su sede en Bahamas.

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Miles de millones de dólares en efectivo de clientes se esfumaron por culpa de una supuesta mala gestión. FTX -que los clientes utilizaban para comprar, vender o especular con el precio de las criptomonedas- se desmoronó en un colapso muy publicitado porque utilizó el dinero de los clientes para hacer apuestas de inversión arriesgadas a través de la empresa comercial Alameda Research, según alegan los fiscales.

El ex CEO de la empresa, que fundó tanto FTX como Alameda Research, se enfrenta ahora a ocho cargos penales. Hoy se ha declarado inocente ante un tribunal federal de Nueva York en el marco de su comparecencia, y el juez ha acordado mantener en secreto los nombres de los avalistas de su fianza de 250 millones de dólares.

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