Tips:
- El presidente de la CNMV pidió a las principales redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter que prohibieran los anuncios de criptomonedas.
- Los esfuerzos de la CNMV y el propio Banco de España para restringir este tipo de anuncios ya tienen tiempo gestándose.
Muchos ven al mercado de criptomonedas como una especie del antiguo Lejano Oeste, donde generalmente impera la ley del más fuerte y cada quien es responsable de cuidar sus propios intereses —pero en España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) está comprometida a cambiar esta percepción.
En una ponencia para el evento 'Supervisor, Criptoactivos y Publicidad: buena praxis del sector', organizado por la Asociación Española de Fintech e Insurtech (Aefi), Rodrigo Buenaventura, presidente de la CNMV (que sería el equivalente a la SEC de Estados Unidos) reveló que el órgano regulador español instó a las grandes redes sociales a que rechazaran anuncios publicitarios de entidades y proyectos de criptomonedas a los que calificó de 'chiringuitos financieros'.
"Es a mi juicio injustificable que empresas que difunden publicidad de pago en redes sociales o buscadores se lucren admitiendo anuncios de entidades pirata, que están públicamente advertidas como 'chiringuitos financieros'” dijo Buenaventura. Agregó que la situación es a su juicio más delicada cuando la vista gorda de dichas empresas ponga “ en peligro los ahorros de sus usuarios y clientes, algunos de los cuales caen en este tipo de fraudes."
España y su lucha contra los anuncios de criptomonedas
Buenaventura considera que la solución más práctica es la prohibición absoluta de este tipo de anuncios. Consciente de que no puede influir en las políticas de las grandes corporaciones por cuestiones de jurisdicción, explicó que están tomando un enfoque regulatorio más estricto; siguiendo un modelo similar al adoptado por Reino Unido. “Les estamos pidiendo que, mediante la autorregulación, se comprometan a que sus redes o páginas no sirvan de vehículo de difusión de engaños y posibles delitos a cambio de aumentar sus ingresos", aseguró.
El problema de las estafas ha despertado la atención de las autoridades españolas. A comienzos de año, el Grupo de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional advirtió sobre el auge de crímenes relacionados con criptomonedas, donde las estafas Ponzi y tirones de alfombras reinaban como las estrategias preferidas por los ciberdelincuentes.
El clamor del presidente de la CNMV de España no es nuevo ni aislado. Ya en 2021, se habían adelantado esfuerzos para introducir normas regulatorias que restringiesen los anuncios de criptomonedas, especialmente tras una controversia con la plataforma de intercambio de criptomonedas Bit2me.
Y recientemente, el Gobernador del Banco de España pidió a los legisladores y fuerzas del orden que ejercieran una vigilancia más intensa sobre toda la industria de criptomonedas. Advirtió inclusive que en caso de periodos de intensa volatilidad, el propio sistema financiero tradicional podría sufrir en un escenario de adopción masiva.
"Es cierto que la existencia de estas grandes oscilaciones en los precios de estos activos puede alterar el sentimiento, provocando una sobrerreacción que acaba trascendiendo a otros entornos comerciales", dijo.
Sin embargo, no todo son espinas. España está trabajando en un entorno regulatorio que promueva el ecosistema cripto, y está permitiendo la inversión en criptomonedas a través de fondos debidamente regulados.