Tips
- El descenso de Bitcoin refleja una peculiaridad de las normas contables más que una pérdida real.
- Por lo demás, Tesla ha tenido un trimestre excepcional.
El fabricante de coches eléctricos Tesla presentó unas cifras de ganancias trimestrales espectaculares, superando por primera vez el billón de dólares en ganancias, al tiempo que producía y entregaba más de 200.000 vehículos. Pero la compañía también reveló que el Bitcoin representó un ligero lastre en sus ganancias.
En un informe de resultados publicado tras el cierre del mercado el martes, la empresa señaló un "deterioro de valor relacionado con el Bitcoin de $23 millones de dólares", lo que es mejor que el deterioro de valor de $100 millones que algunos analistas habían pronosticado. El deterioro de valor es un término contable para cuando una empresa debe reducir el valor de un activo.
En realidad, Tesla lleva la delantera en lo que respecta a sus participaciones en Bitcoin, ya que compró la mayor parte de ellas en febrero, cuando el precio rondaba los $32.000 dólares. Pero no es así cuando se trata de los informes de resultados de las empresas.
El deterioro de valor de Tesla se debe a una peculiaridad de las normas que los contadores utilizan para valorar el Bitcoin y otras criptomonedas. Según esas normas, el Bitcoin se considera un "activo intangible de vida indefinida"— lo que significa que las empresas no pueden registrar un beneficio si el precio sube, pero sí tienen que registrar una pérdida si el precio baja.
Es probable que esta situación resulte frustrante para algunos inversionistas de Tesla, ya que el Bitcoin que compró vale más de lo que pagó la compañía —especialmente en un día como éste en el que el Bitcoin cruzó los $40.000 dólares— pero que aun así resulta en una pérdida para el valor oficial de la firma.
El informe de resultados del segundo trimestre de Tesla abarca el período comprendido entre el 1 de marzo y el 30 de junio, que incluye un período de finales de junio en el que el Bitcoin se desplomó hasta los $28.000 dólares.
El CEO de Tesla, Elon Musk, es un iconoclasta que parece estar dispuesto a tolerar las molestias contables que conlleva poseer Bitcoin, pero los directivos de otras compañías quizá se muestren reacios a incorporarlo a sus fondos corporativos por ese motivo. Una de las pocas excepciones es Square, cuyo CEO, Jack Dorsey, también es una persona inusual —y un ferviente creyente de las criptomonedas. Ambos hablaron recientemente en un panel juntos y elogiaron las virtudes de las criptomonedas.