En Resumen
- Avraham Eisenberg, acusado de manipular el DEX Mango Markets y sustraer $110M en cripto, fue absuelto de fraude y manipulación tras fallo de juez que calificó las reglas del protocolo como "vagas".
- El juez argumentó que la naturaleza sin permisos y automática de Mango complicaba probar intención de fraude.
- Sin embargo, Eisenberg aún enfrenta 4 años de prisión por cargos no relacionados: posesión de pornografía infantil.
Un trader que fue condenado por manipular el exchange descentralizado Mango Markets basado en Solana para sustraer $110 millones en criptomonedas tuvo su condena anulada el pasado viernes.
El año pasado un jurado condenó a Avraham Eisenberg por cargos de fraude de materias primas, manipulación de materias primas y fraude electrónico después de que explotó la aplicación DeFi, del tipo que permite el intercambio y préstamo de criptoactivos sin intermediarios de terceros como los bancos.
Eisenberg explotó una característica en el exchange descentralizado—o DEX—que le permitió inflar artificialmente su colateral para engañar al protocolo y permitirle "pedir prestado" $110 millones en criptomonedas.
Pero el viernes un juez estadounidense se puso del lado de Eisenberg y anuló sus condenas por fraude y manipulación con base en que la evidencia en el juicio no pudo respaldar la decisión del jurado de que era culpable.
En resumen, el juez Arun Subramanian escribió que las reglas para la aplicación DeFi eran vagas. "Mango Markets no tenía reglas y nadie testificó que los usuarios de Mango Markets entendían que pedir prestado reflejaba una intención de pagar", decía el fallo del viernes.
Señaló que la defensa de Eisenberg se basó "en la falta de términos y condiciones en la plataforma y el hecho de que Mango Markets era sin permisos y automático".
En el ecosistema cripto, DeFi se refiere a la industria que busca reemplazar los servicios financieros tradicionales, como casas de bolsa y bancos.
A través de aplicaciones—como exchanges como Mango Markets—los usuarios pueden realizar transacciones financieras sin intermediarios, y obtener préstamos o intercambiar tokens digitales sin permisos, típicamente sin revelar información de identificación personal como nombres, direcciones de correo electrónico o direcciones físicas.
El espacio de rápido movimiento y experimental es notoriamente propenso a hackeos, y las historias de usuarios perdiendo dinero son demasiado comunes.
Los expertos legales con quienes Decrypt habló tenían puntos de vista diferentes sobre qué tan justo fue el resultado de Eisenberg.
Andrew Rossow, abogado de ciberespacio y asuntos públicos con Rossow Law, dijo: "La promesa original de las criptomonedas era la accesibilidad y el empoderamiento. Hoy, sin embargo, los activos digitales se han vuelto cada vez más opacos, inaccesibles e incomprendidos por los mismos consumidores a quienes estaban destinados a servir".
"El individuo promedio no solo está excluido de una participación significativa sino que también queda vulnerable a la explotación por actores sofisticados que operan con impunidad", continuó, agregando que las personas en posiciones de poder—como el presidente Donald Trump—estaban "priorizando el enriquecimiento personal sobre la gobernanza de principios en el espacio de activos digitales".
Los reguladores y las fuerzas del orden han tomado un enfoque más suave para manejar el espacio de rápido movimiento y complicado este año.
Bajo el presidente Trump, favorable a las criptomonedas—quien ha respaldado un proyecto DeFi—los reguladores han desechado una serie de demandas de alto perfil contra empresas y empresarios de criptomonedas.
El nuevo comandante en jefe también ha capitalizado en el espacio, lanzando una memecoin antes de su toma de posesión—generando ira de los demócratas.
Jeffrey Leavitt, asociado en Vedder Price, le dijo a Decrypt que aunque el caso de Mango Markets era preocupante para los fundadores de DeFi, el juez lo hizo bien.
"Eisenberg pudo explotar errores en el código subyacente del protocolo Mango Markets, inflar el valor del token MNGO y retirar colateral contra tokens MNGO que fueron inflados artificialmente", dijo. "Bajo ese marco, no creo que hubiera evidencia para respaldar una condena por fraude".
Pero agregó que: "La saga de Mango Markets es una historia de advertencia para los fundadores de DeFi—un error en el código puede ser fatal para el protocolo".
Antes de su arresto y condena original, Eisenberg se jactó de sus acciones en Mango Markets y se burló de otros usuarios: "¿Qué van a hacer, arrestarme?", tuiteó famosamente en ese momento.
Ahora parece que su bravuconería pudo haber sido acertada. Excepto por una cosa: Eisenberg aún enfrenta cuatro años de prisión por posesión de pornografía infantil, encontrada en su computadora durante la investigación.