En Resumen
- Keith O'Brien admitió espiar para Deel a cambio de $5.000 mensuales en Ethereum.
- Usó Telegram para filtrar secretos de Rippling durante seis meses.
- O'Brien Intentó destruir pruebas y huir a Dubái antes de confesar voluntariamente.
Un hombre irlandés ha admitido aceptar $5.000 mensuales en criptomonedas para espiar a la empresa de gestión de nóminas Rippling a favor de su competidor, Deel, en un esquema de espionaje corporativo digno de Hollywood que captó la atención de los medios globales y casi lo llevó a huir a Dubái.
En una declaración jurada, firmada el 1 de abril y presentada en un tribunal de Dublín, Keith O'Brien alegó que se convirtió en espía corporativo para Deel en septiembre del año pasado, mientras aún era empleado de Rippling.
Entre septiembre de 2024 y marzo de 2025, O'Brien supuestamente usó Telegram para proporcionar al CEO de Deel, Alex Bouaziz, información sobre la estrategia corporativa y conocimientos de clientes de su empleador "varias veces al día cada día laboral" y a veces los fines de semana, según la declaración jurada.
"[El CEO de Deel] sugirió que permaneciera en Rippling y me convirtiera en un 'espía' para Deel, y recuerdo que mencionó específicamente a James Bond", dijo O'Brien en la declaración.
Los ejecutivos de Deel pagaron a O'Brien $5.000 en Ethereum por mes por el espionaje, diciéndole a su topo que el método de pago "no dejaría rastro", según O'Brien. El autoconfeso espía dijo que recibió a regañadientes los tokens en su billetera de Blockchain.com, donde liquidaría los fondos y los transferiría a su cuenta bancaria porque estaba "preocupado por la fluctuación de las criptomonedas".
La admisión llega unas semanas después de que Rippling demandara a Deel en un tribunal federal en San Francisco por supuestamente orquestar "un esquema calculado e ilegal de espionaje corporativo". El drama legal marca el último enfrentamiento entre las empresas de software de RRHH, cada una con valoraciones superiores a los $10.000 millones hace unos años por especializarse en soluciones para gestionar fuerzas laborales remotas que se han vuelto menos comunes en la era post-pandémica.
La demanda también surge mientras la industria de las criptomonedas intenta rehabilitar su imagen, rechazando narrativas populares que afirman que los criptoactivos son favorecidos por actores maliciosos que buscan ocultar sus crímenes.
Divulgación: DASTAN, empresa matriz de Decrypt, fue cliente de Deel, y ahora mantiene un contrato con Rippling.
O'Brien dijo en su declaración que Bouaziz a veces le pedía buscar información específica relacionada con el negocio de Rippling a través del Slack, Salesforce y Google Drive de la empresa. El ejecutivo ordenó a O'Brien ingresar términos de búsqueda como "Tom brady", "iran", "tinybird" y "sanctioned countries" en los sistemas internos de Rippling, según la declaración jurada.
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El ex espía también alegó que Bouaziz parecía particularmente interesado en información sobre clientes de Deel que se habían inscrito para demostraciones de productos de Rippling.
El supuesto esquema terminó a mediados de marzo, cuando un abogado independiente entregó a O'Brien una orden judicial en la oficina de Rippling en Dublín que requería la inspección de los dispositivos del empleado. Esa noche, los abogados de Deel hablaron con O'Brien para explorar la posibilidad de que huyera con su familia a Dubái.
Unos días después de recibir la notificación, O'Brien también realizó un restablecimiento de fábrica en su teléfono, lo cortó con un hacha y lo arrojó por un desagüe en la casa de su madre siguiendo las instrucciones de los abogados de Deel.
Sin embargo, decidió confesar sus supuestos crímenes casi dos semanas después.
"Me di cuenta de que me estaba perjudicando a mí mismo y a mi familia para proteger a Deel", dijo en la declaración. "Estaba preocupado, y todavía estoy preocupado, por lo ricos y poderosos que son [los ejecutivos de Deel], pero... quiero hacer lo que pueda para comenzar a enmendar y corregir estos errores".
Editado por James Rubin
