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LikeCoin, una infraestructura de publicación descentralizada en la blockchain Cosmos, se está utilizando para preservar la cobertura mediática de las protestas de Hong Kong de 2019.
Como informó Quartz, a principios de este mes se empezaron a respaldar episodios clave del programa de actualidad de la ciudad, Hong Kong Connection. El galardonado programa es propiedad de la emisora pública Radio Televisión de Hong Kong. La emisora anunció en mayo que borraría los contenidos de archivo con más de un año de antigüedad; cada vez está más bajo la influencia del gobierno.
Uno de los episodios, "7.21 Who Owns The Truth", informaba de un ataque contra manifestantes y civiles, lo que contribuyó a concienciar sobre las tácticas de la policía de Hong Kong. Se ha conservado mediante Likecoin.
El identificador único de las protestas de Hong Kong
Likecoin se lanzó en beta durante las protestas de Hong Kong en noviembre de 2019, y se planea un lanzamiento oficial en el verano, pero las noticias locales independientes ya están utilizando el servicio. Quartz informa de que Stand News y Citizen News han recurrido a LikeCoin para catalogar sus contenidos.
La infraestructura aloja los metadatos del contenido en cuestión: título, autor, fecha, ubicación, y adjunta una especie de "huella digital" llamada Número Internacional de Contenido Normalizado (ISCN).
Este catálogo de metadatos se asemeja a un único Número Internacional Normalizado de Libros (ISBN), que identifica a los libros. El ISCN marca cualquier cambio en el contenido, como cuadros borrados o reeditados.
Mientras tanto, el contenido real se aloja en el Sistema de Archivos Interplanetarios, una red descentralizada para almacenar archivos, imágenes, aplicaciones y prácticamente cualquier otra cosa.
No es la primera vez que se utiliza la descentralización para ayudar al movimiento de protesta de Hong Kong, que carecía intencionadamente de líderes para que los organizadores pudieran eludir su detección.
Las batallas se han librado, no sólo en las calles de la ciudad, sino también digitalmente,—en las aplicaciones de mensajería instaladas en los ordenadores portátiles y móviles de cientos de miles de manifestantes.
Y ahora, las pruebas digitales tienen una forma de ser aseguradas, validadas y disponibles a perpetuidad.