Bitcoin sube y lleva al mercado de criptomonedas a una capitalización histórica

Liderados por Bitcoin, los mercados de criptomonedas disfrutaron de otro día en verde —antes de una repentina caída— mientras los grandes bancos siguen contando sus pérdidas.

La capitalización del mercado mundial subió un 2,4% durante la noche, llevando a las criptomonedas a $1,92 billones de dólares, según la empresa de datos Nomics. Según la mayoría de los recuentos, se trata de un nuevo máximo histórico, superando el récord anterior en marzo de $1,8 billones de dólares. La primera vez que superó el billón de dólares fue en febrero.

El valor de todos los activos de criptomonedas equivale ahora al 26% de la capitalización de mercado del oro, mientras el metal precioso sigue perdiendo valor gracias a la fortaleza del dólar estadounidensec—más información a continuación.

Esto se debe principalmente al resurgimiento de Bitcoin en las últimas 48 horas. En las primeras operaciones europeas, se situaba justo por debajo de los $60.000 dólares, ganando un 2,5%. Sin embargo, al momento de publicar este artículo, el Bitcoin ha caído en picado bajando $1.000 dólares en minutos y sigue bajando.

Ethereum también había subido, pero ahora se está hundiendo a gran velocidad. Una de las monedas que mejor se comportó en la jornada fue Binance Coin, que ganó un 11,5%, consolidando su posición como la tercera criptomoneda mas grande del mundo. En la última semana, BNB ha ganado un tercio, desde su mínimo de $230 dólares hasta los $310 dólares al momento de escribir este artículo.

Binance parece estar beneficiándose de la noticia de que uno de los mayores proyectos de DeFi de EOS ha abandonado la blockchain para unirse a Binance Smart Chain alegando "promesas incumplidas".

Más abajo en los límites de mercado, el token FIL de Filecoin subió un 23% en menos de 12 horas, sumándose a su rendimiento estelar del fin de semana, en el que añadió un 30% a su precio del token. Las ganancias parecen estar relacionadas con el renovado interés en el proyecto después de que Grayscale anunciara que iba a añadir el proyecto a su fondo de inversión.

A medida que el primer trimestre llega a su fin, los analistas reflexionan sobre el rendimiento del mercado, y la imagen que les devuelve es que la criptomoneda ha tenido uno de sus mejores momentos en casi una década, según la empresa de análisis Skew, a pesar del flash crash que está afectando a los mercados.

El Bitcoin se acerca a su mejor desempeño en ocho años, acumulando un 80% de ganancias. Será el cuarto trimestre consecutivo que la moneda sube. Históricamente, el Bitcoin ha representado la mayor parte del valor del mercado general de criptomonedas, pero a medida que el dominio del BTC se reduce al 50%, es una señal alcista de que la criptomoneda en general ha tenido un trimestre extraordinario.

También el dólar esta encaminado a su mejor trimestre en un año. El índice del dólar subió a su nivel más alto en casi cinco meses frente a divisas rivales, lo que lo sitúa en su mejor mes desde 2016.

Gracias a la aceleración de la recuperación de la economía estadounidense y al aumento de las tasas de interés—lo que significa que el dinero prestado hoy se devolverá más mañana —los vendedores en corto del billete verde han salido en masa de sus posiciones cortas, según Bloomberg.

El oro, mientras tanto, cayó a sus mínimos en tres semanas durante la jornada asiática, lo que significa que el metal se encamina a su peor trimestre desde 2016.

Mientras que las divisas están disfrutando de un trimestre excelente, no se puede decir lo mismo de los bancos atrapados en la caída de Archegos Capital. Las últimas noticias, de acuerdo con JPMorgan, estiman que las pérdidas se acercan a los $10.000 millones de dólares.

El conglomerado japonés Nomura ha informado de que espera perder $3.000 millones de dólares, mientras que Credit Suisse prevé pérdidas de $4.000 millones. Los analistas y los inversionistas están tratando de calcular las pérdidas finales de los bancos expuestos a la implosión de Archegos, tarea que se ve dificultada por la naturaleza opaca de las operaciones de apalancamiento.