En Resumen
- Ryan Salame, ex ejecutivo de FTX, fue condenado a siete años y medio de prisión por su papel en la caída del exchange.
- Salame podrá conservar su Porsche 911 Turbo S del 2021, valorado en $285.000.
- Aunque Salame cooperó con el gobierno, los fiscales lo describieron como un actor relativamente menor en el colapso de FTX.
El ex ejecutivo de FTX, Ryan Salame, fue condenado el martes a siete años y medio de prisión, convirtiéndose en el último líder del ahora en quiebr exchange de criptomonedas en ir tras las rejas por su papel en su caída. Pero las noticias no son del todo malas para Salame.
Mientras que el ex lugarteniente del fundador de FTX, Sam Bankman-Fried (SBF) y co-CEO de FTX Digital Markets Ltd. se preparaba para una sentencia de prisión de varios años, entregada en una sala de audiencias de Manhattan el martes, los fiscales federales dijeron que Salame puede conservar un automóvil de lujo que compró durante el ascenso meteórico de FTX antes de la sentencia.
El gobierno afirmó en un documento que el valor de su Porsche 911 Turbo S del 2021 "no tiene suficiente patrimonio para continuar con la confiscación", argumentando que Salame debería estar obligado a pagar el costo de mantenimiento del vehículo, que es de $1.500. Anteriormente, Salame aceptó la confiscación de activos por valor de $1.500 millones relacionados con delitos vinculados a FTX.
Semanas antes de que comenzara el juicio de Bankman-Fried, en el que el ex magnate de las criptomonedas fue encontrado culpable de robar $10.000 millones a sus clientes, inversores y prestamistas, Salame llegó a un acuerdo de culpabilidad. Se declaró culpable de violar la ley de financiamiento de campañas y de operar un negocio de transmisión de dinero sin licencia en septiembre pasado. Con el juez de distrito de EE. UU. Lewis Kaplan decidiendo su destino, otros ex asociados de SBF continúan esperando sus sentencias.
A principios de este mes, el gobierno solicitó que Salame fuera condenado entre cinco a siete años de prisión, citando los "crímenes graves" que cometió en FTX. Pero los abogados de Salame argumentaron que esa es una sentencia demasiado severa para el ex CEO de la filial de FTX en las Bahamas. Han dicho que debería cumplir 18 meses por su mala conducta.
Los abogados de Salame afirman que su cliente fue "engañado" por Bankman-Fried haciéndole creer que FTX era estable. Sin embargo, los fiscales argumentaron en un memorándum de sentencia que Salame retiró más de $5 millones en criptomonedas de FTX mientras el exchange se tambaleaba bajo una avalancha de retiros de clientes en noviembre de 2022, justo antes de declararse en quiebra y cerrar.
Aunque Salame hizo esfuerzos por cooperar con el gobierno, los fiscales describieron sus interacciones como "relativamente menores" en comparación con la de otros involucrados en el colapso de FTX.
“Ryan Salame acordó promover los intereses de FTX, Alameda Research y sus cómplices a través de una campaña de influencia política ilegal y a través de un negocio de transmisión de dinero no autorizado, lo que ayudó a FTX a crecer más rápido y más grande al operar al margen de la ley," dijo el fiscal estadounidense Damian Williams en un comunicado el martes, tras la sentencia.
La ex CEO de Alameda Research, Caroline Ellison, el ingeniero jefe Nishad Singh y el cofundador de FTX, Gary Wang, todos declararon en contra de Bankman-Fried, pero Salame nunca entró en un proceso de cooperación formal con el gobierno. Tampoco se reunió personalmente con los fiscales.
Bankman-Fried fue condenado a 25 años de prisión en marzo, pero algunos cómplices, que se declararon culpables de delitos relacionados con la implosión de FTX, anticipan un trato más leve. Ellison, Singh y Wang podrían ser sentenciados en algún momento de este año por el Juez Kaplan.
Para Salame, su Porsche probablemente está conectado a buenos momentos. Fabricado en Stuttgart, Alemania, Salame compró su Porsche 911 por $285.000 en octubre de 2021—el mismo mes en que FTX promocionó una recaudación de fondos de Serie B-1 de $420.690.000, elevando el malogrado exchange a una valoración de $25.000 millones.
Con una larga lista de modificaciones de lujo, estéticas y basadas en el rendimiento—como un volante calefactable con detalles de fibra de carbono mate—el coche aún podría estar esperandolo la próxima vez que Salame salga a la carretera dentro de unos años
Editado por Andrew Hayward