En Resumen
- La muerte del Papa Francisco impulsó un aumento del 45% en la memecoin LUCE y su volumen diario superó los $60 millones.
- Los mercados de apuestas posicionaron a Pietro Parolin como favorito para sucederlo, con un 37% de probabilidad.
- Francisco murió a los 88 años tras un derrame cerebral; criticó la IA por sus riesgos éticos y su uso en conflictos armados.
La muerte del Papa Francisco el Lunes de Pascua provocó una ola de actividad en los mercados de criptomonedas y plataformas de predicción, mientras traders y apostadores buscaron beneficiarse con la noticia.
LUCE, una memecoin basada en Solana nombrada en honor a la mascota animada para el próximo Año Santo 2025 del Vaticano, ha subido aproximadamente un 45% en el día, según datos de CoinGecko.
El token se cotiza a $0,013 y ha visto su volumen diario de negociación aumentar a $60,27 millones, desde $5 millones el día anterior a que la noticia del fallecimiento del pontífice apareciera en titulares de todo el mundo.
A pesar de una advertencia de que no está afiliada ni es oficial, LUCE ha atraído a aproximadamente 44.800 poseedores. Aún permanece un 95% por debajo de su pico de noviembre de $0,30.
Apuestas sobre el cónclave
En la tradición católica romana, cuando un papa muere o renuncia, los cardenales se reúnen para elegir al sucesor mediante voto secreto, conocido como cónclave papal.
Como resultado, los mercados de apuestas han lanzado iniciativas en torno a las perspectivas de sucesión papal. En Myriad Markets, operado por la empresa matriz de Decrypt, Dastan, los apostadores han colocado al cardenal italiano Pietro Parolin a la cabeza con una probabilidad del 37%.
Este es seguido por el cardenal Luis Antonio Tagle de Filipinas con un 27%, con más apuestas en otros no nombrados en un 34%.
El cónclave será convocado dentro de las próximas tres semanas para elegir al próximo líder de la Iglesia Católica, que cuenta con 1.400 millones de miembros.
Nacido en Argentina, Jorge Mario Bergoglio tomó el nombre papal de Francisco en 2013 cuando fue elegido, convirtiéndose en el primer papa no europeo en aproximadamente 1.300 años.
El joven Bergoglio trabajó como portero en una discoteca en Buenos Aires. A los 36 años, dirigió la congregación jesuita de Argentina. Murió a los 88 años tras un derrame cerebral y colapso cardiovascular.
Bergoglio había sido un crítico vocal de los excesos tecnológicos durante su papado.
A finales de 2023, describió la inteligencia artificial como "la apuesta de mayor riesgo de nuestro futuro" e instó a que se desarrollara para "servir al mejor potencial de la humanidad".
El año pasado, Bergoglio denunció el uso de la IA en la guerra, diciendo: "Ninguna máquina debería jamás elegir quitar la vida a un ser humano".
Editado por Sebastian Sinclair