Mientras el colapso de la plataforma de criptomonedas FTX hace tambalear la fe en los actores centralizados de la industria, Telegram está interviniendo para construir alternativas descentralizadas y sin confianza.

En su canal de Telegram el miércoles, Pavel Durov—el fundador y CEO de la plataforma de mensajería—anunció que la compañía comenzaría a construir "wallets no custodiados" y "exchanges descentralizados" que permitirían a millones de usuarios comerciar con sus criptomonedas de forma segura.

"De esta manera podemos arreglar los males causados por la excesiva centralización, que defraudó a cientos de miles de usuarios de criptomonedas", dijo Durov.

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El ejecutivo argumentó que el proyecto debería ser más que factible: el desarrollo de Fragment, la plataforma de subastas descentralizada de Telegram, "tomó sólo 5 semanas y 5 personas, incluyéndome a mí", de acuerdo con Durov.

El mercado, que fue lanzado el mes pasado, ya ha recaudado 50 millones de dólares en Toncoin mediante la venta de nombres de usuario tokenizados en la blockchain. Funciona a través de The Open Network (TON)—el sucesor espiritual de las antiguas ambiciones de blockchain de Telegram, que fueron aplastadas por la Comisión de Bolsa y Valores hace años.

Durov, reuniendo a la comunidad de desarrolladores, hizo un llamamiento para que el sector vuelva a orientarse hacia las aplicaciones descentralizadas y no tenga que confiar en terceros. La dependencia de entidades centralizadas, dijo, hizo que muchos perdieran su dinero en la bancarrota de FTX a "manos de unos pocos que empezaron a abusar de su poder".

FTX ha sido acusada de gestionar mal los fondos de sus clientes al prestarlos a su mesa de operaciones hermana, Alameda Research—algo que no está permitido a las empresas del sector de las plataformas. Otras plataformas se esfuerzan ahora por implantar mejores controles y equilibrios en sus empresas, incluyendo sistemas de prueba de reservas que intentan verificar la posesión de los fondos de los clientes en la cadena.

El fundador de Cardano, Charles Hoskinson, se hizo eco del mismo argumento de Durov con respecto a FTX en la Cumbre de Criptomonedas y Activos Digitales del Financial Times el miércoles.

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"Los fallos que estamos teniendo no son fallos de los protocolos, no son fallos de DeFi", dijo Hoskinson. "Son fallos de confianza, son fallos de regulación, son fallos de las personas".

Los usuarios de criptomonedas parecen pensar lo mismo. Los analistas de JP Morgan observaron una "severa" fuga de fondos de otras centrales de intercambio después de que FTX se declarara en bancarrota, incluyendo Gemini, OKX y Crypto.com.

El colapso de FTX también ha desencadenado un contagio de criptomonedas que afecta a numerosas empresas centralizadas de préstamos de criptomonedas. BlockFi ya se ha declarado en bancarrota, mientras que otras mesas de intercambio como Genesis han congelado los retiros.

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