La exchange FTX de Sam Bankman-Fried, puede haber sido considerada como la salvadora del invierno de las criptomonedas, pero en el último giro de su racha de adquisiciones, la compañía ha sido acusada de rebajar una de sus ofertas de rescate.

El corredor de criptomonedas en quiebra Voyager Digital ha calificado el acuerdo de rescate propuesto por FTX como "una oferta baja disfrazada de rescate de caballero blanco" en los documentos presentados ante el tribunal de quiebras en el Distrito Sur de Nueva York el domingo por la noche.

Voyager dijo que la propuesta conjunta hecha por FTX y la otra firma de Bankman-Fried, Alameda, estaba "diseñada para generar publicidad para sí misma en lugar de valor para los clientes de Voyager".

Voyager alegó además que la forma en que se hizo la propuesta, a través de un comunicado de prensa público, podría poner en peligro un proceso de licitación separado para los activos de la empresa, que se está llevando a cabo de forma privada.

"La propuesta de AlamedaFTX (sic) no es más que una liquidación de criptomonedas sobre una base que beneficia a AlamedaFTX", decían los documentos.

Voyager solicitó la protección de la bancarrota el 5 de julio de este año y al mismo tiempo presentó un plan para reorganizar la empresa y devolver el dinero a los inversores.

Pero también ha estado explorando propuestas alternativas a través de conversaciones con más de 80 inversores de terceros y ha pedido indicaciones de interés de los posibles compradores para este viernes.

Desgranando las reclamaciones judiciales de Voyager

En la nueva presentación, Voyager esboza varios problemas que tiene con la propuesta de FTX y Alameda, incluyendo la alegación de que el licitador "despreció abiertamente" a Voyager e incluyó declaraciones en su comunicado de prensa que son "en el mejor de los casos, muy engañosas."

Uno de los puntos conflictivos es la afirmación de Alameda y FTX de que los clientes de Voyager tienen derecho a una cantidad fija basada en el valor de sus wallets el 5 de julio, cuando la plataforma de intercambio se acogió a la protección por quiebra del Capítulo 11. Pero Voyager no está de acuerdo con esta premisa, y dijo que su propio plan de reorganización de la empresa no limita las reclamaciones de los clientes de esta manera.

El acuerdo de rescate también eliminaría efectivamente el propio token VGX de la plataforma, que Voyager estima que destruiría inmediatamente 100 millones de dólares.

Otras cuestiones planteadas son la carga fiscal para los clientes que deseen retirar dinero en efectivo, así como la confusión sobre el hecho de que FTX ha dicho que la marca Voyager no tiene ningún valor independiente, pero querría un descuento en su precio de adquisición si la marca se vendiera a otra persona.

Los acuerdos de "caballero blanco" de FTX

Voyager es sólo una de las pocas empresas de criptomonedas en apuros que FTX ha observado en medio de la caída del mercado. El mes pasado, adquirió la plataforma de intercambio canadiense Bitvo, y actualmente está en proceso de comprar el problemático prestamista BlockFi.

Bankman-Fried ha hablado de la "responsabilidad" de FTX de estabilizar el ecosistema de criptomonedas interviniendo cuando sea posible, un concepto que también se señaló en la propuesta de FTX de adquirir los activos y préstamos digitales de Voyager. En un documento en el que se describen los beneficios de la transacción propuesta, Alameda y FTX dijeron que les interesaba demostrar que "el negocio de las criptomonedas puede resolverse como otras instituciones financieras", fomentando así la confianza en las criptomonedas como clase de activos.

En una respuesta en Twitter a la última presentación judicial de Voyager, Bankman-Fried caracterizó las objeciones a la oferta de FTX como "el desfile de "por favor, danos alguna excusa para cobrar más honorarios en el patrimonio"."

Bankman-Fried también añadió que la oferta estaba motivada por el deseo de devolver a los clientes su dinero antes de que pudiera ser vaciado por el proceso de quiebra.

"Muchas partes intentaban pujar a 0,10 dólares por los activos", escribió. "Si un cliente tenía 100 dólares en la plataforma, un tercero pagaría 10 dólares por ellos, se quedaría con los fondos que quedaran (quizá 75 dólares) y luego el cliente... recuperaría 10 dólares".

Voyager ha pedido a los posibles compradores que manifiesten su interés antes de este viernes para poder determinar si existe una alternativa mejor a su propio plan.

En su propuesta, FTX dijo que no tenía inconveniente en que este proceso continuara junto con las discusiones sobre su propia oferta por los activos de Voyager, y que ésta podría entonces decidir si firmar un acuerdo para su operación en función de las demás ofertas que recibiera.

Si Voyager cambia de opinión y se decide finalmente por FTX, el acuerdo podría cerrarse este mismo fin de semana, según el calendario inicial de FTX.

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