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El volumen de ciberataques relacionados con el Bitcoinse ha disparado casi un 200% en los últimos ocho meses, desde la llegada de la reciente carrera alcista de las criptomonedas.
Según un informe de la empresa de seguridad Barracuda Networks, el volumen de suplantaciones de identidad relacionadas con Bitcoin y los ataques de compromiso de correo electrónico empresarial se dispararon hasta un 192% entre octubre de 2020 y mayo de 2021.
Los analistas afirman que el aumento de los ciberataques está estrechamente relacionado con el precio de Bitcoin, que aumentó casi un 400% durante el mismo periodo de tiempo en el que se inició la reciente carrera alcista de las criptomonedas.
La carrera alcista tuvo lugar en un contexto de interés de los inversores institucionales en Bitcoin, con empresas como MicroStrategy y Tesla anunciando que añadirían Bitcoin a sus tesorerías corporativas. Con el Bitcoin en los titulares, el interés de los minoristas aumentó, al igual que los ciberataques dirigidos a las reservas de Bitcoin de los inversores.
Según Fleming Shi, director de tecnología de Barracuda Networks, anteriormente los atacantes se hacían pasar por instituciones financieras, apuntando a las credenciales bancarias de los usuarios. En los últimos meses, han cambiado sus métodos, utilizando tácticas similares para Bitcoin en ves de dinero fiat.
Los analistas afirman que una de las tácticas favoritas de los hackers es hacerse pasar por wallets de Bitcoin u otras aplicaciones relacionadas con las criptomonedas con falsas alertas de seguridad para robar las credenciales de acceso.
Otras estrategias a las que recurren los ciberdelincuentes son el spear-phishing -un método para dirigirse a individuos específicos dentro de una organización que parece provenir de una fuente de confianza- así como los ataques de extorsión, en los que los atacantes afirman estar en posesión de un vídeo o información comprometedora. Amenazan con hacer pública esta información si la víctima no paga un rescate en Bitcoin.
Una forma de que las empresas resistan estas amenazas, según Barracuda, es "formar a los usuarios y empleados para que reconozcan las últimas tácticas utilizadas por los hackers", así como hacer copias de seguridad de sus datos y asegurarse contra el creciente volumen de ataques de ransomware.
El informe se produce tras una serie de recientes ataques de ransomware de gran repercusión, como los sufridos por la empresa de oleoductos Colonial Pipeline y la empresa de procesamiento de carne JBS.
A raíz de estos incidentes, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos anunció que el ransomware tendría la misma prioridad que el terrorismo.