En Resumen
- Musk anunció a través de un tweet que Neuralink buscaba a su segundo participante para un ensayo de implante cerebral.
- Neuralink no proporcionó detalles adicionales sobre el ensayo ni aclaró la seriedad de la descripción del implante.
- Neuralink implantó su dispositivo en el cerebro de su primer paciente en enero, quien experimentó progreso significativo.
Elon Musk, CEO de Tesla, SpaceX y Neuralink, anunció el viernes a través de un tweet que Neuralink está buscando a su segundo participante para someterse a una prueba de implante cerebral. En el estilo característico de Musk, el tweet describió el implante como un "implante cerebral cibernético de telepatía que te permite controlar tu teléfono y computadora sólo con pensarlo".
Neuralink es una empresa desarrollada por Musk que tiene como objetivo construir interfaces cerebro-computadora o brain-computer interfaces (BCIs). El objetivo de estas BCIs es permitir que personas con condiciones como parálisis controlen dispositivos digitales solo con sus pensamientos.
Musk no proporcionó detalles adicionales sobre el ensayo, ni aclaró si estaba siendo serio o no con su descripción, y Neuralink no ha publicado ninguna información al respecto en sus plataformas de redes sociales. Sin embargo, la última actualización del estudio PRIME de la compañía invita a las personas a postularse como sujetos de prueba para su ensayo clínico.
PRIME, que significa "Pilot Research Implant for Medical Experimentation" (Implante de Investigación Piloto para Experimentación Médica), es el ensayo clínico de Neuralink que tiene como objetivo evaluar la seguridad y funcionalidad inicial de su dispositivo BCI completamente implantable e inalámbrico, el chip N1. El chip es altamente invasivo, ya que implica miles de hilos diminutos que penetran en el cerebro.
Neuralink is accepting applications for the second participant.
This is our Telepathy cybernetic brain implant that allows you to control your phone and computer just by thinking.
No one better than Noland (@ModdedQuad) himself to tell you about the first! https://t.co/k9DaZ3xr5g
— Elon Musk (@elonmusk) May 17, 2024
Neuralink ha enfrentado controversia en el pasado, con expertos asegurando que sus pruebas en animales resultaron en las muertes de más de mil animales—lo cual Musk niega—y que Neuralink falló en proporcionar documentación relacionada con la calibración y mantenimiento de su "monitor de signos vitales".
En enero, Neuralink implantó su dispositivo en el cerebro de su primer paciente, Noland Arbaugh. Arbaugh, quien está paralizado de los hombros hacia abajo debido a un accidente de buceo en 2016, afirma que ha experimentado un progreso significativo con el dispositivo.
Sin embargo, ahora puede jugar videojuegos, navegar por internet y controlar un cursor de computadora en su computadora portátil usando solo sus pensamientos. Según Neuralink, Arbaugh rápidamente superó el récord mundial de velocidad de control de cursor después de la cirugía.
La semana pasada, Neuralink reveló que los diminutos cables del implante dentro del cerebro de su primer paciente se movieron de posición durante el primer ensayo humano, lo que resultó en menos electrodos para medir las señales cerebrales. La compañía logró restaurar la función del implante realizando ajustes, incluida la mejora de su algoritmo para aumentar la sensibilidad.
Para contrarrestar estos riesgos, están surgiendo nuevas alternativas de empresas rivales, como Precision Neuroscience, que opta por lo que afirma ser un enfoque más seguro y menos invasivo al recubrir el cerebro con una especie de manta eléctrica para registrar su actividad.
Los criterios de elegibilidad para el ensayo de Neuralink incluyen individuos dentro de los Estados Unidos o Canadá, mayores de 18 años, que tengan cuadriplejia, paraplejia, pérdida de visión, pérdida de audición, la incapacidad de hablar y/o amputación de miembros principales (por encima o por debajo del codo y/o la rodilla), y que puedan dar su consentimiento. Los posibles participantes pueden solicitarlo visitando el Registro de Pacientes de Neuralink.
Editado por Andrew Hayward