La Organización Internacional de Comisiones de Valores (OICV) ha publicado un informe sobre las finanzas descentralizadas (DeFi), en el que destaca un amplio abanico de riesgos asociados al nicho de las criptomonedas, de 217.000 millones de dólares.
" DeFi busca obviar a los intermediarios tradicionales entre las partes de las transacciones. Aunque se argumenta que la desintermediación permite una ejecución más rápida, más barata y más eficiente de las transacciones, también elimina a los participantes del mercado que tradicionalmente han actuado como guardianes, desempeñando funciones centrales de garantizar la protección de los inversores y la integridad del mercado", dijo la OICV.
El grupo internacional de reguladores de valores ha incluido una lista de los "principales" riesgos que presenta la industria DeFi, añadiendo la advertencia de que esta lista no es exhaustiva.
En cualquier caso, documentan una plétora de amenazas que podrían perjudicar a los consumidores, a la integridad del mercado o a ambos.
OICV en DeFi
El informe de la OICV expone ocho riesgos principales inherentes a la industria DeFi.
La organización destacó en primer lugar el riesgo de integridad del mercado, que puede surgir de los préstamos especulativos, las operaciones y los empréstitos que suelen aparecer en los sistemas DeFi.
"Estos riesgos incluyen los causados por la desinformación o la manipulación de los precios y los conflictos de intereses", dice el informe. La OICV señala que este tipo de riesgos de integridad del mercado también se dan en el mundo de las finanzas tradicionales. Sin embargo, hay otros riesgos relacionados con DeFi que son "un tanto exclusivos" del sector, dice la OICV.
Entre ellos se encuentran el front-running—donde los mineros pueden beneficiarse utilizando su capacidad para reordenar o censurar ciertas transacciones de la blockchain—y los préstamos flash, que según la OICV se han visto en los principales protocolos DeFi construidos en la red Ethereum.
Otros riesgos son la dependencia del mercado de ciertos agentes (como los validadores y los proveedores de liquidez), el uso del apalancamiento y los riesgos basados en la tecnología que pueden "dar lugar a la reducción, el deterioro o la ruptura de los productos y servicios".
"El DeFi pretende trasladar la confianza de los intermediarios tradicionales a la tecnología y, por tanto, presenta riesgos inherentes basados en la tecnología", dice el informe.
La OICV también señala el riesgo de actividad ilícita, debido a la falta de procedimientos KYC y al uso de "tecnologías que aumentan el anonimato".
"Existen riesgos significativos para aquellos que realizan transacciones en DeFi para comprometerse con una contraparte sancionada o con activos de criptomonedas obtenidos a través de actividades ilícitas", dijo también la OICV.