Arthur Hayes y Benjamin Delo, fundadores de la plataforma de intercambio de criptomonedas BitMEX, se han declarado culpables de violar la Ley de Secreto Bancario de Estados Unidos.
Según un comunicado de prensa del Departamento de Justicia de EE.UU., Hayes y Delo incumplieron intencionadamente "la obligación de establecer, aplicar y mantener un programa contra el lavado de dinero en BitMEX". Ambos han acordado pagar por separado una multa penal de 10 millones de dólares que representa las ganancias derivadas del delito.
El fiscal federal Damian Williams—que anunció las declaraciones de culpabilidad—dijo que ambos hombres "permitieron que BitMEX operara como una plataforma en las sombras de los mercados financieros", y añadió que "las declaraciones de culpabilidad de hoy reflejan el compromiso continuo de esta Fiscalía con la investigación y persecución del lavado de dinero en el sector de las criptomonedas."
Williams dijo que las empresas de criptomonedas se han convertido en "guardianes críticos" en el esfuerzo más amplio para garantizar que los mercados estadounidenses sean justos, eficientes y seguros.
Founders of cryptocurrency exchange plead guilty to bank secrecy act violations https://t.co/HDro0zieEA
— US Attorney SDNY (@SDNYnews) February 24, 2022
"Las oportunidades y ventajas de operar en Estados Unidos son legión, pero conllevan la obligación de que esas empresas pongan de su parte para contribuir a la lucha contra la delincuencia y la corrupción".
Hayes y Delo se enfrentan ahora a una pena máxima de cinco años de prisión.
El caso BitMEX
BitMEX es una plataforma de intercambio de criptomonedas que, según documentos judiciales y archivos públicos, tuvo presencia en Estados Unidos entre septiembre de 2015 y septiembre de 2020.
A pesar de las "falsas declaraciones en sentido contrario de la empresa", BitMEX prestó servicio a "miles" de clientes estadounidenses.
Ambos individuos supuestamente "hicieron que BitMEX no estableciera ni mantuviera un programa de lucha contra el lavado de dinero", incluyendo un programa de "conocimiento del cliente" (KYC) que verificara la identidad de los clientes de BitMEX.
"Como resultado de su fracaso deliberado en la implementación de programas AML y KYC, BitMEX era en efecto una plataforma de lavado de dinero", añadió el comunicado de prensa.
Es más, según el escrito de acusación, los expedientes judiciales públicos y las declaraciones del tribunal, ambos hombres estaban "siguiendo de cerca" la evolución de la normativa estadounidense, lo que les habría hecho muy conscientes de sus obligaciones legales al respecto.
Servicio a los clientes de EE.UU.
A pesar de que ambos afirmaron en repetidas ocasiones que la empresa no atendía a clientes estadounidenses, Hayes y Delo sabían que la "supuesta retirada de BitMEX del mercado estadounidense en septiembre de 2015 o en torno a esa fecha era una farsa", señala el comunicado.
Al parecer, ambos hombres no sólo sabían que los clientes estadounidenses seguían operando en BitMEX, sino que también sabían que estos clientes "obtenían importantes beneficios" de BitMEX.
Es más, ambas partes habrían buscado clientes estadounidenses apoyándose en el "Programa de Afiliados" de BitMEX, un programa que comercializaba la empresa entre los clientes estadounidenses utilizando "influencers".
En un caso, Delo permitió a un cliente con sede en Estados Unidos seguir accediendo a BitMEX porque la persona era "famosa en Bitcoin".