Mientras el mundo sigue atento al experimento de El Salvador con Bitcoin, un alto funcionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) ha vuelto a advertir sobre el "grave riesgo" que suponen las criptomonedas para la estabilidad del sistema financiero.
Utilizando el término "criptonización" para describir el proceso de sustitución de las monedas existentes por activos digitales, Tobias Adrian, consejero financiero del FMI, dijo que "habrá que afinar las medidas de gestión de los flujos de capital".
"Aplicar las herramientas reguladoras existentes para gestionar los flujos de capital puede resultar más difícil cuando el valor se transmite a través de nuevos instrumentos, nuevos canales y nuevos proveedores de servicios que no son entidades reguladas", declaró Adrian al Financial Times.
Según Adrian, las fluctuaciones de precios de las criptodivisas están provocando flujos de capital "desestabilizadores" en los mercados emergentes, mientras que el uso de activos digitales en lugar de dinero fiduciario conlleva "riesgos inmediatos y agudos."
" Las criptomonedas se están utilizando para sacar el dinero de los países que se consideran inestables [por algunos inversores externos]", dijo el funcionario del FMI, añadiendo que es "un gran desafío para los responsables políticos de algunos países."
El mercado de criptomonedas ha perdido más de un billón de dólares en valor desde que Bitcoin alcanzó su máximo histórico por encima de los 69.000 dólares en noviembre de 2021. La criptodivisa de referencia cotiza a 37.600 dólares al cierre de esta edición, un 18,7% menos en el último mes y casi un 46% menos que el máximo de noviembre, según CoinGecko.
El FMI también está preocupado por la creciente correlación de Bitcoin con los mercados financieros tradicionales, como las acciones y los bonos del Estado.
"La correlación entre los mercados de criptomonedas y los de renta variable ha experimentado una fuerte tendencia al alza. Las criptomonedas están ahora muy vinculadas a lo que ocurre en la renta variable. No podemos descartarlo sin más", dijo Adrian.
El FMI vs. El Salvador
El Salvador se convirtió en el primer país del mundo en adoptar oficialmente el Bitcoin como moneda de curso legal el año pasado. La medida, anunciada por primera vez por el presidente del país centroamericano, Nayib Bukele, en la Conferencia Bitcoin de Miami, fue recibida con fuertes críticas por parte del FMI.
La semana pasada, el FMI volvió a instar a El Salvador a deshacerse de la controvertida legislación, argumentando que la economía del país se está reduciendo mientras su deuda pública crece.
"La adopción de una criptomoneda como moneda de curso legal [...] conlleva grandes riesgos para la integridad financiera y del mercado, la estabilidad financiera y la protección del consumidor. También puede crear pasivos contingentes", dijo el FMI en un informe.
En diciembre, el FMI dijo que se necesitan "normas internacionales exhaustivas" para hacer frente a esos riesgos, e instó a los reguladores nacionales y mundiales a establecer un "enfoque normativo exhaustivo, coherente y coordinado para las criptomonedas".
A pesar de las advertencias del FMI, algunos propietarios de negocios en El Salvador han mostrado recientemente su apoyo a la ley de Bitcoin del presidente Bukele, diciendo que el uso de las criptomonedas ayudó a aumentar sus ventas.