Si pensabas que el desangramiento del mercado de Bitcoin y otras criptomonedas había terminado (al menos en este ciclo), tenemos malas noticias para ti.

El retroceso de las criptomonedas continuó durante la noche y en la mañana del martes. Bitcoin descendió un 4,5% en las últimas 24 horas según Nomics, acumulando su segundo día consecutivo de pérdidas.

Desde los máximos de 61.500 dólares alcanzados el domingo, Bitcoin ha llegado a cotizar a 53.000 dólares en las últimas 24 horas, lo que supone una caída de más del 10%. Para los mercados de futuros, el panorama era aún más sombrío.

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Según un tuit de los cofundadores de Glassnode, Jan y Yann, se produjeron liquidaciones de 500 millones de dólares en posiciones largas de Bitcoin -apuestas a que el precio subiría- en una hora. Según Glassnode, se trata de la mayor cantidad que se ha liquidado nunca. Los fundadores atribuyeron las pérdidas masivas a un "exceso de codicia en el sistema".

Pero otros señalaron que las pérdidas fueron aún mayores. La empresa de datos bursátiles Bybt informó de que las pérdidas superaban los 1.000 millones de dólares.

Según el Índice de Miedo y Avaricia, estas pérdidas tan importantes han tenido un impacto en el sentimiento del mercado. Durante la última racha alcista, el sentimiento se situó sistemáticamente en los 90 puntos, lo que sugiere que la codicia estaba impulsando el precio al alza. Este mes, sin embargo, el sentimiento ha retrocedido hasta los 70, lo que sugiere que la exuberancia de febrero se ha enfriado.

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Echando un vistazo más de cerca a otras medidas del mercado en Market Milk, el sentimiento ha vuelto a territorio neutral, lo que sugiere que los inversores están sentados en esta ronda de turbulencias a la espera de ver si esta caída es parte del patrón más amplio de Bitcoin de subidas y bajadas o si algo más grande está en marcha.

Echando un vistazo a lo que está sucediendo en Wall Street, los criptoinversores tendrán razones para estar alegres.

El Dow Jones subió más de 100 puntos y el índice S&P 500 también alcanzó nuevos máximos, gracias a la finalización de la ley de estímulo de 1,9 billones de dólares que está preparada para estimular el gasto de los consumidores y encender el crecimiento económico.

El Dow Jones subió. IMAGEN: Google

Esto ha llevado a una serie de economistas a mejorar sus expectativas para la economía estadounidense en general.

Goldman Sachs prevé que el paquete de rescate fiscal dará un impulso aún mayor a la economía en 2021, estimando que el producto interior bruto se expandirá un 6% en el primer trimestre.

Sin embargo, las buenas noticias van acompañadas de la sensación de que no todo va bien. Los mercados estarán pendientes de las declaraciones del presidente de la Fed, Jerome Powell, que debe hacer una declaración esta semana, en busca de pistas sobre si el banco central está cada vez más preocupado por los movimientos en el mercado de bonos, y por una economía que podría recalentarse.

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