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Un ex empleado de la hackeada plataforma de intercambio de criptomonedas neozelandesa Cryptopia se ha declarado hoy culpable de robar más de 170.000 dólares en recursos digitales y datos de clientes, según los informes.
El acusado, que aún no puede ser nombrado por razones legales, admitió dos cargos de robo en el Tribunal de Distrito de Christchurch, informó el lunes el sitio de noticias neozelandés Stuff.
Cryptopia fue la mayor exchange de criptodivisas de Nueva Zelanda hasta que entró en liquidación en 2019 tras un importante hackeo. En el hackeo desaparecieron criptomonedas por valor de 17,85 millones de dólares, y los antiguos usuarios todavía están en proceso de recuperar sus fondos robados.
La audiencia de hoy no estaba relacionada con el exploit de 2019. Pero el acusado, que ha quedado en libertad bajo fianza, ha afirmado haber planteado a la dirección su preocupación por la seguridad de las llaves privadas de los monederos de Cryptopia. Más tarde hizo copias de las llaves privadas y se las llevó a casa para ponerlas en su ordenador, informó Stuff. El acusado pudo entonces, supuestamente, sustraer fondos de los monederos de Cryptopia con facilidad.
Stuff informó que el exempleado admitió más tarde lo que había hecho en septiembre de 2020, después de que la firma de contabilidad Grant Thornton (que está a cargo de supervisar la devolución de los fondos robados de cualquier usuario desde el hack de 2019) notó que se habían perdido criptomonedas de varias billeteras. Entonces ofreció devolver los fondos a lo largo del tiempo, dijo Stuff.
El acusado será sentenciado el 20 de octubre.
En su apogeo, Cryptopia reportó 1,4 millones de usuarios en todo el mundo. Desde su hackeo en 2019, los titulares de las cuentas han conseguido tener prioridad sobre los acreedores de Cryptopia para recuperar sus criptomonedas perdidas.
La identidad del hacker aún se desconoce.