Por Sander Lutz
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Tan solo en los últimos cuatro días, el influencer de acciones meme Keith Gill, también conocido como Roaring Kitty, ha perdido más de $350 millones en su posición de GameStop (GME). Aunque no lo pensarías por su comportamiento.
Mientras GME seguía perdiendo valor el lunes, Gill se burlaba de su propia fortuna, publicando memes en Twitter menospreciando su situación financiera. Y a medida que el precio caía en tiempo real durante su transmisión en vivo del viernes, la primera en tres años, llevaba vendajes falsos y tenía el brazo en una férula mientras actuaba herido.
Pero los golpes recibidos en los últimos días por el famoso trader de acciones no son una broma. Justo el jueves pasado, Gill estaba en la cima con más de $382 millones de beneficios (al menos en papel) por las opciones colocadas en GME, según capturas de pantalla de una cuenta de ETrade que publicó en Reddit.
Luego, un desastroso informe de ganancias trimestrales de GameStop hizo que las acciones de GME se desplomaran. El viernes, Gill perdió más de $235 millones en su posición de GME. La carnicería continuó el lunes, cuando GME cayó un 12% adicional, luego de desplomarse un 40% en las horas justo antes del fin de semana.
GME cerró en $24,83 el lunes por la tarde. Para dar una idea de la pérdida: en la negociación después del cierre el jueves por la noche, la acción había subido hasta $61,27.
El movimiento de precios ha borrado casi todas las ganancias recientes de Gill. Para la noche del lunes, el influencer informó que aún estaba alrededor de $31 millones en positivo, lo que significa que ha perdido cerca de $351 millones en ganancias desde la semana pasada.
Permanece incierto si toda la inversión de Gill en GME también podría estar en peligro legal.
La semana pasada, surgieron informes de que los reguladores están investigando a Gill por preocupaciones de manipulación debido a una serie de tweets crípticos (y no tan crípticos) en las últimas semanas, que han hecho que las acciones de GME y otras acciones de memes y tokens cripto asociados a ellas se disparen. Incluso ETrade supuestamente está considerando prohibirle el acceso.
La saga es algo reminiscente del famoso short squeeze de las acciones de GME por parte de los traders minoristas, que Gill arquitectó en 2021. En ese entonces, la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos investigó el asunto, pero en última instancia determinó que no se había producido manipulación del mercado.
Editado por Andrew Hayward
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