Por Andrew Asmakov
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La implosionada plataforma de intercambio de criptomonedas FTX quiere que el tribunal de bancarrota de Delaware expulse a sus unidades turcas del caso de bancarrota, argumentando que las órdenes judiciales estadounidenses "no tienen efecto legal o práctico" en Turquía.
En una solicitud presentada el viernes, FTX también dijo que no hay "ninguna razón para creer que el gobierno turco cumplirá con las órdenes de este Tribunal", lo que significa que la plataforma de intercambio no será capaz de "ejercer un control suficiente" sobre los asuntos de las unidades turcas para cumplir con sus obligaciones en virtud del Código de Bancarrota.
Poco después de que FTX solicitara acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Bancarrota en noviembre, el Ministerio del Tesoro y Hacienda turco inició una investigación sobre la quiebra de la plataforma de intercambio, que gestionaba una filial local llamada FTX Turkey, antes de embargar sus activos a finales de ese mismo mes.
Según se detalla en la solicitud, la plataforma de intercambio local es propiedad en un 80% de FTX Trading Ltd, mientras que el 20% restante pertenece a SNG Investments, una filial indirecta propiedad al 100% de Alameda Research LLC, que operaba como creador de mercado.
La solicitud se refiere tanto a FTX Turkey como a SNG Investments como "no estratégicas" para las operaciones globales de FTX.
Además, los ciudadanos han comenzado a presentar solicitudes privadas y a iniciar procedimientos de ejecución contra los deudores turcos de FTX Turkey, de acuerdo con la solicitud.
FTX argumenta que esto también significa que cualquier activo de FTX Turkey situado en el país puede estar sujeto a esas reclamaciones y procedimientos privados, añadiendo que las autoridades locales pueden utilizarlos para satisfacer cualquier sentencia de los tribunales turcos.
Por todo ello, FTX considera que la desestimación de las entidades turcas redunda en beneficio tanto de los acreedores como de los patrimonios de los deudores, y que continuar con el procedimiento "supondrá un despilfarro de recursos escasos y la acumulación innecesaria de tasas."
El viernes también los fiscales federales pidieron al juez de distrito Lewis Kaplan que prohibiera al fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, utilizar canales de comunicación cifrados como Signal.
Los fiscales alegaron que, mediante el uso de aplicaciones de mensajería, podría haber intentado influir en el testimonio de posibles testigos en el procedimiento de bancarrota.
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