Por Scott Chipolina
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La Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido (FCA) ha sacado a concurso la contratación de consultores externos para ayudar a formar a su personal sobre los riesgos de lavado de dinero y financiación del terrorismo que presenta el sector de las criptomonedas.
La FCA va a gastar 500.000 libras esterlinas (670.000 dólares) en estos consultores, debido a la preocupación de que las criptomonedas estén siendo utilizadas por malos actores.
"La FCA está buscando los servicios para apoyar el análisis de los datos de blockchain de activos de criptomonedas. La FCA está buscando los servicios de una empresa de terceros especializada en esta área que pueda proporcionar acceso a una plataforma que pueda apoyar el análisis robusto y eficiente de los datos de blockchain de activos de criptomonedas y proporcionar formación y apoyo continuo en el uso de esta plataforma", dijo la FCA.
El anuncio llega en medio de una serie de meses en los que la financiación del terrorismo relacionada con las criptomonedas ha sido noticia.
Entre ellos, un portavoz de Hamás admitió un aumento de las donaciones de Bitcoin en medio del nuevo conflicto con Israel, extremistas de extrema derecha que recaudan millones en criptomonedas y el Departamento de Justicia de EE.UU. que eleva los ataques de ransomware—que a menudo implican criptomonedas—a un nivel de prioridad similar al del terrorismo.
Este es el último movimiento en el enfoque de la FCA hacia la industria de las criptomonedas, pero también simboliza un cambio significativo en las prioridades del regulador cuando se trata de criptomonedas.
A lo largo de 2021, la FCA ha tomado una serie de decisiones de alto perfil en relación con la industria de las criptomonedas, la mayoría de las cuales se han centrado en los riesgos para los consumidores y la protección de los inversionistas.
En enero, la FCA prohibió los derivados de criptomonedas para los inversionistas minoristas, citando la volatilidad de los precios y la falta de comprensión de los consumidores como razones—entre otras—para la prohibición.
El regulador también ha emitido en múltiples ocasiones una advertencia a los consumidores contra el sector de las criptomonedas, en la que aconsejaba a los inversionistas que estuvieran preparados para "perder todo su dinero" si invertían en activos de criptomonedas.
En esa advertencia a los consumidores, la FCA expuso una serie de preocupaciones relacionadas con las criptomonedas, como la volatilidad de los precios, el marketing engañoso y la falta de comprensión de los consumidores, entre otros problemas.
El nuevo régimen de formación de la agencia, sin embargo, significa que la FCA está preocupada por algo más que la protección del consumidor cuando se trata de criptomonedas.
Puede que los anuncios públicos de la FCA hasta la fecha se centren en la protección del consumidor, pero desde enero del año pasado, el regulador es el supervisor del Reino Unido en materia de lavado de dinero y financiación del terrorismo para el sector de las criptomonedas.
El 10 de enero de 2021, la FCA anunció que todas las empresas que realizaban actividades específicas de criptomonedas entraban en el ámbito de aplicación de la normativa británica sobre lavado de dinero, financiación del terrorismo y transferencia de fondos y, por tanto, respondían ante la FCA.
Desde entonces, algunas empresas han obtenido una licencia de la FCA, pero otras han tenido problemas.
El ejemplo más destacado es el de Binance, que vio cómo su entidad británica—Binance Markets Limited (BML)— era atacada por la FCA.
En el verano, la FCA dijo que tenía un gran problema con la aparente falta de sede de Binance, y más tarde dijo que el intercambio era "incapaz" de ser regulado después de que BML no proporcionara información básica sobre cómo se organiza Binance.
Decrypt lleva pidiendo información a Binance sobre cómo se organiza Binance Group desde agosto.
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