Por Mat Di Salvo
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El presidente Donald Trump sacudió los mercados financieros esta semana al dar un giro en su política de aranceles comerciales, dejando a los operadores de renta variable algo confundidos sobre qué hacer.
Bitcoin, como activo de riesgo, no pudo escapar de la volatilidad: la moneda ha oscilado entre $94.770 y $82.681 durante los últimos siete días, según datos de CoinGecko. Actualmente se cotiza a $85.925 después de subir menos del 1% durante la última semana.
Mientras el S&P 500 tuvo su peor semana en meses, Bitcoin ciertamente se vio afectado, cayendo después del repunte del domingo pasado, impulsado por las publicaciones de Trump sobre la reserva de criptomonedas. El precio incluso volvió a caer el jueves después de que el presidente Donald Trump anunciara formalmente la creación de una reserva de Bitcoin y el correspondiente almacenamiento de criptomonedas.
¿Por qué? Los operadores pueden haber vendido la noticia el jueves después de muchas especulaciones sobre los planes de reserva, además de que la moneda evidentemente todavía se mueve con las volátiles acciones estadounidenses cuando hay incertidumbre macroeconómica.
Y esta semana estuvo lejos de ser cierta: el presidente Trump hizo varios anuncios sobre la cantidad y el momento de los aranceles a los socios comerciales, asustando a los mercados en el proceso.
Los inversores estadounidenses retiraron dinero de los nuevos ETF de Bitcoin esta semana, ya que la política comercial del presidente Trump hizo que los fondos fueran menos atractivos. El viernes fue el peor día de la semana, muestran los datos de Farside Investors, con salidas por valor de $409 millones, llevando las pérdidas de la semana a $740 millones.
Sin embargo, no es tan malo como la semana anterior, cuando los ETF de Bitcoin tuvieron su peor día registrado. Hasta que los mercados se estabilicen, no podemos estar seguros de cuándo los inversores querrán comprar acciones en los fondos con el mismo entusiasmo que el año pasado.
Finalmente sucedió: el presidente Trump cumplió con su promesa de campaña y el jueves firmó una orden para establecer una reserva estratégica de Bitcoin.
La reserva —que funcionará como otras reservas gubernamentales— mantendrá los casi 200.000 Bitcoin que EE.UU. ya tiene en su posesión por incautaciones.
Pero la orden agrega que "desarrollará estrategias para adquirir Bitcoin gubernamental adicional, siempre que dichas estrategias sean neutrales desde el punto de vista presupuestario".
La noticia llegó después de que el domingo los bitcoiners más acérrimos estuvieran furiosos cuando el presidente anunció a través de su plataforma Truth Social que el gobierno también mantendría otras criptomonedas. Pero desde entonces, el líder estadounidense ha dejado claro que tales altcoins se mantendrían en un almacenamiento diferente.
Entonces, la pregunta de día es, ¿cuánta más compra y HODL harán las autoridades? El Zar de Criptomonedas de la Casa Blanca, David Sacks, dijo antes de la cumbre de criptomonedas de la Casa Blanca el viernes que la administración Trump no planea vender activos gubernamentales de reserva como el oro para comprar más Bitcoin... al menos no todavía.
Sacks agregó que, si bien no se hablaba de vender oro por dinero mágico de Internet —como esperaban muchos de los maximalistas acérrimos—, los Secretarios del Tesoro y de Comercio pronto discutirían cómo comprar más BTC sin costo para los contribuyentes.
En otras noticias, el estado de Texas se acercó a tener su propia reserva de Bitcoin después de que el Senado aprobara un proyecto de ley el jueves. La legislación propuesta, conocida como proyecto SB21, tiene como objetivo crear un "fondo de inversión administrado por el estado centrado en Bitcoin y otras criptomonedas de alta capitalización de mercado".
¿Les suena familiar? Eso es porque el año pasado, el representante estatal de Texas Giovanni Capriglione propuso el H.B. No. 1598 para el Estado de la Estrella Solitaria —un proyecto de ley que permitiría al gobierno local acumular Bitcoin.
El SB 21 es otro proyecto de ley de criptomonedas que, si se aprueba, sería único ya que permitiría al estado "un enfoque más flexible y orientado a la inversión, potencialmente permitiendo a Texas capitalizar los movimientos del mercado de criptomonedas". Eso significa comprar otras altcoins.
Ahora pasará a la Cámara para otra votación. ¿Mantendrá contentos a los maxis?
Editado por Andrew Hayward
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