Por Andrew Hayward
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XRP estuvo a dos centavos de su máximo histórico establecido hace siete años, en un momento decisivo que puntualizó el incremento semanal en valor para el activo vinculado a Ripple.
La criptomoneda alcanzó un máximo de $3,38 el jueves, según datos de CoinGecko, llegando a menos del 1% de la marca histórica de $3,40 establecida en enero de 2018. XRP desde entonces ha retrocedido a $3,30, manteniéndose aún con un incremento del 10% en las últimas 24 horas.
Durante la última semana, XRP ha aumentado un 45%, disparándose nuevamente después de registrar ganancias monumentales en noviembre y diciembre.
XRP ha subido un 560% desde el Día de las Elecciones el 5 de noviembre, cuando el candidato republicano pro-criptomonedas Donald Trump aseguró un segundo mandato en la Casa Blanca. Se espera que tome posesión el lunes.
La anticipación por la próxima administración de Trump sin duda está añadiendo combustible al cohete de XRP. Hay un creciente optimismo de que los ETF de XRP serán aprobados para operar en Estados Unidos bajo la SEC de Trump, después de años de batallas legales entre Ripple y el régimen actual de la SEC liderado por el presidente Gary Gensler.
Incluso con el próximo cambio en el regulador, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) se ha negado a retroceder en su demanda contra Ripple. El miércoles, la SEC presentó su escrito inicial en su apelación de un veredicto que favoreció parcialmente a Ripple, con la agencia buscando una reversión de la clasificación anterior de XRP por parte del tribunal.
La semana pasada, el CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, y el Director Legal, Stuart Alderoty, se reunieron con Trump, compartiendo Garlinghouse una foto de los tres hombres a través de X (anteriormente Twitter).
“[Esperamos un] fuerte comienzo para 2025”, escribió Garlinghouse.
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