Por Kate Irwin
3 min lectura
El mes pasado, los desarrolladores de videojuegos se volvieron locos por los planes de Unity de implementar una "tarifa de tiempo de ejecución" basada en la instalación de juegos. Ahora, el CEO de Unity, John Riccitiello, está renunciando.
La empresa de motores de juegos anunció que Riccitiello, quien tiene 65 años, se jubila y deja la compañía de manera inmediata. También dejará su puesto como miembro de la Junta Directiva de Unity, pero asumirá un papel de asesor como parte de la transición, según el comunicado de prensa.
James Whitehurst asumirá los roles de CEO y presidente de forma interina y también ocupará un lugar en la junta directiva de Unity.
"Estoy seguro de que Unity está bien posicionada para seguir mejorando su plataforma, fortaleciendo su comunidad de clientes, desarrolladores y socios, y enfocándose en sus objetivos de crecimiento y rentabilidad", dijo Whitehurst en un comunicado.
Roelof Botha asumirá el cargo de presidente en Unity.
"John ha liderado a Unity a través de un crecimiento increíble en los últimos casi 10 años, ayudándonos a hacer la transición de una licencia perpetua a un modelo de suscripción, permitiendo a los desarrolladores monetizar, construyendo otros servicios de juegos para servir a nuestra comunidad de creadores, guiándonos a través de una IPO y posicionándonos como pioneros en la comunidad de desarrolladores", dijo Botha en un comunicado.
La junta directiva de Unity está buscando activamente un reemplazo permanente para ocupar los cargos de Riccitiello. Riccitiello se convirtió en miembro de la junta directiva de Unity hace una década, en 2013, y se convirtió en su CEO en 2014. Anteriormente, se desempeñó como CEO, COO y presidente del destacado editor de videojuegos Electronic Arts.
Mientras que el nuevo liderazgo de Unity se mantiene optimista, la noticia de la partida de Riccitiello llega apenas semanas después de que la empresa de tecnología de juegos enfrentara una gran controversia después de anunciar una nueva "Tarifa de tiempo de ejecución de Unity" para los desarrolladores que se basa en los ingresos de los desarrolladores y el número de instalaciones, en lugar de un modelo de reparto de ingresos.
Aproximadamente una semana después, Unity dio marcha atrás en algunos de sus planes para la nueva tarifa, que se lanzará en 2024, pero no la ha eliminado por completo.
La salida de Riccitiello puede no ser sorprendente para algunos en la industria de los videojuegos que han estado pidiendo que el ejecutivo renuncie durante años.
Game World Observer informó el año pasado que los desarrolladores de juegos exigieron que Riccitiello renunciara como CEO después de que el ejecutivo llamara "los mayores idiotas de mierda" a los creadores de juegos que no comprenden la importancia de la monetización.
Luego de que se anunciara la tarifa de tiempo de ejecución el mes pasado, varias peticiones aparecieron pidiendo a Unity que remueva a Riccitiello de su puesto como CEO. Si bien esas peticiones solo recibieron alrededor de 90 firmas, numerosos posts en Reddit también llamaron a su remoción.
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