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Puede que la pandemia haya provocado una tormenta, pero también abonó un terreno fértil para la innovación.
El auge de la Inteligencia Artificial, liderado por herramientas de IA generativa como ChatGPT y Stable Diffusion, no sólo ha ayudado a la recuperación del sector tecnológico, sino que lo ha impulsado hacia un crecimiento sin precedentes. De cara al futuro, una cosa está clara: la IA no es sólo una parte de la industria tecnológica, sino que se está convirtiendo en la industria tecnológica.
Los mercados, en general, se están recuperando tras la pandemia. Sin embargo, la llegada de la IA ha sido especialmente beneficiosa para las acciones tecnológicas, sobre todo para los fabricantes de hardware.
El ejemplo reciente más evidente, por supuesto, es NVIDIA —la empresa que está detrás de la construcción de las principales tarjetas gráficas en el mercado y los creadores de la tecnología CUDA, sin la cual los desarrollos contemporáneos de la IA no serían factibles.
En sólo cinco meses, NVIDIA ha experimentado la alza más significativa de su cotización bursátil en toda su historia. Ahora ha registrado un repunte del 166% tras soportar una caída del 50% debida a una dura combinación de conflictos políticos entre EE.UU. y China, la crisis de los chips de 2022 y la paralización del mercado provocada por la pandemia de COVID-19. En menos de medio año, la empresa se ha recuperado de estas pérdidas, y no hay indicios de que vaya a ralentizarse a corto plazo.
Acciones de Nvidia. Imagen: TradingView
Sin embargo, NVIDIA no es la única empresa que está cosechando los beneficios del auge de la IA. Otras empresas competidoras y relacionadas también están obteniendo importantes ganancias de esta nueva tendencia. He aquí algunos de los ganadores.
AMD fabrica soluciones informáticas y gráficas de alto rendimiento que se utilizan en aplicaciones de IA. Han desarrollado GPU y CPU específicas optimizadas para cargas de trabajo de aprendizaje automático e IA, y son la segunda opción más popular de GPU para los usuarios domésticos.
En lo que va de año, las acciones de la empresa han subido un 94% desde $65 hasta su precio actual de $125. Si el precio de la acción alcanza los $145, compensaría todas las pérdidas del año pasado.
Acciones de AMD. Imagen: TradingView
TSM es la mayor manufacturadora de semiconductores independiente (pure-play) del mundo. Como tal, produce chips para varias empresas, muchas de las cuales se dedican a la IA.
La empresa ha subido un 39% desde principios de año. Con otra subida del 20%, recuperaría las pérdidas de 2022. ¿Crisis de chips? ¿Dónde?
Acciones de TSM. Imagen: TradingView
Micron Technology es un líder mundial en la industria de los semiconductores. Fabrican una amplia gama de productos de memoria y almacenamiento, que son componentes cruciales para los sistemas de IA y aprendizaje automático que requieren un procesamiento de datos rápido y eficaz.
Las acciones de MU han aumentado un 47% en lo que va de 2023, y tienen un potencial de crecimiento de otro 27% antes de encontrar la resistencia marcada por su propio máximo histórico.
Acciones de MU. Imagen: TradingView
Más allá del ámbito del hardware, las empresas de software también están experimentando un año espectacular, sobre todo debido a la explosión de la IA generativa, con ChatGPT a la cabeza.
Anteriormente conocida como Facebook, Meta es una de las favoritas entre los inversionistas. El cambio de enfoque del metaverso a la IA está dando resultados a la empresa de Mark Zuckerberg, que, además de implementar soluciones en su modelo de negocio tradicional, también ha publicado importantes contribuciones de código abierto, como el Gran Modelo de Lenguaje LLaMa.
Un Gran Modelo de Lenguaje (o LLM) es un modelo de IA entrenado en una gran cantidad de datos de texto y capaz de generar respuestas similares a las humanas a diferentes peticiones de texto. (Esto simula una conversación utilizando lenguaje natural.) El LLaMA es un LLM muy popular entre los usuarios y desarrolladores de IA.
Meta ha tenido su mejor rendimiento semestral de la historia, subiendo un 116% en lo que va de 2023.
Acciones de META. Imagen: TradingView
La empresa de Bill Gates es conocida por ser la creadora de Windows y de la consola de videojuegos Xbox. Pero ahora está ganando terreno por ser "padrinos" de OpenAI, la empresa que desarrolló LLM GPT-4 y ChatGPT, el chatbot que puso la IA en el punto de mira de los medios de comunicación.
OpenAI está valorada en 29.000 millones de dólares, y sólo Microsoft ha invertido 13.000 millones. La decisión de incorporar GPT-4 a su navegador Edge y al motor de búsqueda Bing, así como de utilizar Bing como motor de búsqueda predeterminado para ChatGPT, ha sido un catalizador para la cotización bursátil del gigante tecnológico. En lo que va de 2023, Microsoft ha subido casi un 40%, compensando las pérdidas del año anterior,
Acciones de Microsoft. Imagen: TradingView
Alphabet, la empresa matriz de Google, ha invertido mucho en IA. Han desarrollado las Unidades de Procesamiento Tensorial (TPU), que son circuitos integrados específicos de la aplicación (ASIC) desarrollados a medida y utilizados para acelerar las cargas de trabajo de aprendizaje automático. También son los desarrolladores de TensorFlow, una biblioteca de IA de código abierto, y ofrecen servicios de IA basados en la nube. En el ámbito del software, la empresa ha estado mucho más activa.
El lanzamiento de Bard con su PaLM2 mejorado ha sido un éxito, posicionándolo como competidor directo de ChatGPT. El lanzamiento de modelos LLM adaptados a las necesidades de los clientes ha generado una respuesta positiva entre sus inversionistas (a diferencia de lo que ocurrió cuando la empresa presentó su primer chatbot y éste empezó a alucinar). Las acciones de GOOGL han subido un 40% en lo que va de año y están a un 20% de crecer hasta que vuelvan a desafiar la resistencia de su máximo histórico.
Acciones de Google. Imagen: TradingView
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