Por Scott Chipolina
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El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha anunciado la presentación de una demanda de confiscación civil para recuperar más de 150 millones de dólares de fondos malversados en Bitcoin. El FBI rastreó los fondos durante una investigación de robo que involucraba a Sony.
"Estados Unidos emprendió hoy una acción en un tribunal federal para proteger y, en última instancia, devolver más de 154 millones de dólares en fondos que supuestamente fueron robados de una filial de Sony Group Corporation, con sede en Tokio, y que luego fueron incautados por las fuerzas del orden durante la investigación del FBI sobre el robo", dijo el Departamento de Justicia en un comunicado.
Un empleado de Sony presuntamente malversó estos fondos en mayo de 2021, convirtiéndolos en más de 3.800 Bitcoin (que ahora valen más de 180 millones de dólares).
"Esos fondos fueron incautados por las fuerzas del orden el 1 de diciembre de 2021, en base a la investigación del FBI", añadió el Departamento de Justicia.
Ese empleado de Sony ha sido nombrado por el Departamento de Justicia como Rei Ishii. Ishii era empleado de Sony Life Insurance Company Ltd, una filial del Grupo Sony.
Según el Departamento de Justicia, Ishii supuestamente desvió los 154 millones de dólares cuando la empresa intentó transferir estos fondos entre sus propias cuentas financieras.
El Departamento de Justicia afirma que Ishii falsificó las transacciones, haciendo que los fondos se desviaran de una cuenta controlada por la empresa a otra que Ishii controlaba en un banco de California. Luego, Ishii supuestamente convirtió los fondos en Bitcoin. La demanda de confiscación civil también se presentó en California para proteger los fondos de Sony.
La investigación del FBI contó con la "importante ayuda" de otras entidades policiales, como la Agencia Nacional de Policía de Japón, el Departamento de Policía Metropolitana de Tokio y la Unidad de Fiscales de Japón sobre Delitos Emergentes.
Sony y Citibank también colaboraron en la investigación. Ambas empresas "se pusieron inmediatamente en contacto y cooperaron con las fuerzas del orden en cuanto se detectó el robo", declaró la agente especial del FBI a cargo, Suzanne Turner.
"Nuestra intención es devolver el dinero robado a la víctima de este audaz robo, y la acción de hoy nos ayuda a hacerlo", dijo el fiscal federal en funciones Randy Grossman.
"No se puede confiar en las criptomonedas para ocultar las ganancias mal habidas de las fuerzas del orden. Estados Unidos se coordina ampliamente con sus socios internacionales para prevenir los delitos y recuperar los fondos robados", añadió Grossman.
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