Por Stacy Elliott
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Ayer un juez aprobó un acuerdo de conciliación de las contrademandas entre el fondo de cobertura de criptomonedas en quiebra Three Arrows Capital y el prestamista de criptomonedas desaparecido BlockFi.
Pero los detalles permanecen bajo sello, según el juez de la Corte de Quiebras de Nueva Jersey, Michael Kaplan, a pesar de los esfuerzos durante una audiencia judicial el martes del Síndico de los Estados Unidos para argumentar que no había una necesidad justificable de un sello en la información.
La disputa entre las dos empresas se centró en deudas significativas.
BlockFi alegó que 3AC les debía $129 millones. En contraste, 3AC respondió con reclamos de que BlockFi les debía $280 millones. Esta batalla legal fue parte de una mayor agitación dentro de la industria de las criptomonedas, que involucra a múltiples entidades enfrentando dificultades financieras y desafíos legales.
BlockFi presentó una solicitud de protección por bancarrota del Capítulo 11 en noviembre de 2022. La presentación ocurrió después del colapso del exchange de criptomonedas FTX y su propia solicitud de quiebra solo dos semanas antes. La insolvencia de BlockFi se debe en parte a su exposición sustancial al exchange de criptomonedas colapsado.
La empresa de Nueva Jersey tenía $355 millones en criptomonedas congeladas en FTX, un préstamo incumplido de $671 millones a Alameda Research, una firma de comercio estrechamente asociada con FTX, y había aceptado una llamada línea de crédito de "rescate" de FTX solo meses antes de que las dos empresas colapsaran.
En octubre, después de menos de un año de reestructuración, BlockFi puso fin a su bancarrota.
3AC recibió la orden de liquidarse durante el verano de 2022, principalmente debido a la dramática caída de las criptomonedas Luna y TerraUSD en mayo.
La empresa, que fue una de las primeras entidades cripto importantes en declararse en bancarrota ese año, solicitó la bancarrota en las Islas Vírgenes Británicas a finales de junio de 2022. Esta acción legal fue una respuesta directa a la incapacidad de la empresa para cumplir con sus obligaciones financieras, incluido el incumplimiento de llamadas de margen y la devolución de dinero prestado por varias entidades dentro de la industria cripto.
Desde entonces, sus cofundadores, Kyle Davies y Su Zhu, han enfrentado tiempo en la cárcel, lanzado y cerrado una plataforma de negociación de reclamos de deuda, y ahora están enfocando sus esfuerzos en un proyecto de negociación de derivados llamado OX.fun.
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