Por Matt Hussey
6 min lectura
Erik es el fundador y desarrollador principal de NEO, y el creador del mecanismo de consenso de Tolerancia Delegada a Faltas Bizantinas dBFT. Pero si no hubiera sido por un encuentro casual en 2014, probablemente nunca se habría convertido en uno de los innovadores más prominentes de la industria blockchain. En esta entrevista, exploramos el viaje de Zhang antes de la cadena de bloques, las lecciones que ha aprendido desde entonces y por qué ahora es el mejor momento para saltar al espacio.
Durante el 2013, conocí a Bitcoin mientras trabajaba para Shanda Games. Bitcoin está disponible como un método de pago de nicho pero popular dentro de los juegos publicados por Shanda, y por lo tanto fue mi primera exposición a las criptomonedas. Si nunca me hubiera encontrado con Bitcoin en Shanda, probablemente habría seguido trabajando en la industria de la seguridad.
En 2014, me reuní con Da Hongfei para desarrollar el concepto de AntShares, el primer proyecto de blockchain pública iniciado en China, que con el tiempo se convirtió en NEO, como se conoce actualmente.
NEO es una red abierta para la economía inteligente. Utiliza tecnología blockchai e identidad digital para digitalizar los activos, y luego se utilizan contratos inteligentes para automatizar la gestión de estos activos digitales. La característica principal de NEO es que permite a los usuarios desplegar y escalar eficientemente aplicaciones de contratos inteligentes en la cadena de blockchain, con el fin de conseguir la cadena de bloques amigable con los desarrolladores.
Después de dos iteraciones exitosas, NEO 3.0 será una implementación robusta y de alto rendimiento, mayor estabilidad y seguridad, con un sistema de contratos inteligentes optimizado y una infraestructura repleta de funciones para diversos escenarios de aplicaciones industriales. y de negocios
OnChain
Me gradué de la universidad en 2009 y comencé a trabajar en la industria de la seguridad, específicamente en la seguridad de la información. Después de cinco años, me trasladé a Shanda Games, donde también me centré en la seguridad de la información, y fue aquí donde me encontré por primera vez con Bitcoin. Si nunca me hubiera encontrado con Bitcoin en Shanda, probablemente habría seguido trabajando en el sector de la seguridad sin muchos cambios en mi carrera.
Nací y crecí en Shanghai y pasé muchos años trabajando allí. Me fui a un nuevo puesto con Huobi en Beijing, donde casualmente asistí a una conferencia de Bitcoin a principios de 2014. Allí conocí al otro fundador de NEO, Da Hongfei, que asistió como orador invitado.
Da Hongfei compartió algunas ideas en su discurso en la conferencia, incluyendo un prototipo de su proyecto llamado AntShares. El discurso me pareció muy interesante, y a mediados de 2014 dejé Huobi y regresé a Shanghai, donde me reuní con Da Hongfei para seguir trabajando sobre el concepto de AntShares. AntShares se convirtió en NEO, como se conoce ahora.
Encontrar a los mejores talentos para lograr nuestros objetivos es el mayor reto que se me ocurre.
Mantente concentrado.
Crear una empresa en la web descentralizada es mucho más fácil y escalable que nunca. En el futuro, la capa de datos se aislará de la capa de aplicación y las infraestructuras serán más maduras (DID, almacenamiento descentralizado, etc). Estos cambios reducirán la barrera de entrada, permitiendo que nuevos innovadores se unan al juego.
Todo el viaje de NEO ha sido bastante agradable hasta ahora, no hay nada que me gustaría cambiar. NEO es un proyecto de blockchain pública impulsada por la comunidad, y la forma en que colaboramos es muy descentralizada. Creo que mi sugerencia es probablemente un mejor esquema de comunicación para coordinar a las diferentes comunidades a favor de nuestra visión de una economía inteligente.
Hay tantos proyectos emocionantes en la industria que es muy difícil identificar sólo uno o unos pocos para distinguirlos de los demás. Soy un gran partidario de Bitcoin y creo firmemente en el talento que empuja a la sociedad hacia una nueva era descentralizada.
Creo que el primer lote de aplicaciones revolucionarias probablemente surgirá de las finanzas, la gestión de la privacidad y la distribución de contenidos. A medida que las infraestructuras maduran, podemos esperar que la disrupción de estos espacios ocurra muy pronto.
Es una tarea muy interesante y desafiante. Hemos visto que muchos DAO (organizaciones autónomas descentralizadas) han elegido sus propios caminos distintivos hacia un nuevo paradigma empresarial descentralizado. Creo que hay algunos principios cruciales a seguir: un esquema de gestión de proyectos ágil pero efectivo, un sistema de incentivos positivos y un grupo de colegas con puntos de vista similares.
Por su naturaleza, la blockchain busca reducir el costo de la transferencia de confianza a través de la descentralización, y la tecnología relacionada ayudará a las empresas a alcanzar este objetivo.
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