4 min lectura
Los estadounidenses se sienten aprensivos sobre el creciente uso de la inteligencia artificial (IA) en la contratación y evaluación de trabajadores, según un nuevo estudio publicado por el Centro de Investigación Pew.
Pew Research encuestó a 11,004 adultos estadounidenses a mediados de diciembre de 2022, preguntando a los participantes por sus opiniones sobre el impacto de la IA en la fuerza laboral. Si bien algunos encuestados reconocieron la eficiencia de la contratación impulsada por la IA, muchos expresaron temores de que la tecnología pudiera invadir la privacidad, afectar las evaluaciones y llevar a la pérdida de empleos.
Según el estudio, publicado el jueves, el 32% de los estadounidenses cree que la IA en la contratación y evaluación de trabajadores es más probable que perjudique que ayude a los solicitantes de empleo y empleados.
Setenta y uno por ciento de los ciudadanos estadounidenses están en contra de la idea de utilizar la IA para decidir si contratar o despedir a alguien. Por otro lado, el estudio encontró que el 40% de los estadounidenses todavía piensan que la IA puede proporcionar beneficios a los solicitantes de empleo y empleados al acelerar los procesos de contratación, reducir errores humanos y eliminar posibles sesgos inherentes a la toma de decisiones humanas. Algunos encuestados también destacaron el potencial de las evaluaciones de rendimiento impulsadas por la IA para proporcionar una evaluación más objetiva y consistente de las habilidades y productividad de los trabajadores.
La investigación revela que el 32% de los estadounidenses cree que en los próximos 20 años, la inteligencia artificial causará más daño que beneficio a los trabajadores, con solo el 13% mostrando un punto de vista optimista, con casi dos tercios de los encuestados diciendo que no solicitarían un trabajo si supieran que iban a ser evaluados por una inteligencia artificial.
Estas preocupaciones se extienden a varios aspectos del proceso de contratación, desde la selección de currículums y la evaluación de solicitantes hasta el monitoreo del desempeño y las decisiones de personal. El informe destaca que la mayoría de los participantes se preocupan de que los sistemas de IA infrinjan su privacidad al recopilar demasiada información personal, como el historial de navegación o la actividad en las redes sociales. El estudio dice que el 90% de los trabajadores de clase alta, el 84% de los trabajadores de clase media y el 70% de los trabajadores de clase baja tienen preocupaciones de ser "vigilados inapropiadamente si se usara la IA para recopilar y analizar información".
A medida que la IA continúa haciendo incursiones en la fuerza laboral, los líderes de la industria tecnológica han estado presionando a los responsables políticos, empresas y desarrolladores para abordar las preocupaciones del público. En la Unión Europea, por ejemplo, los reguladores han intentado prevenir un posible mal uso al exigir transparencia en los sistemas de IA, educación y capacitación para que los trabajadores se adapten a un panorama laboral en constante cambio. Algunas de las mentes más famosas de la industria de la IA han pedido una pausa en la capacitación de modelos más avanzados en un esfuerzo por abordar estos problemas antes de que sea demasiado tarde.
Mientras tanto, los reguladores han comenzado a prestar atención a cómo se entrenan estos modelos de inteligencia artificial y cómo podrían afectar los derechos de los ciudadanos. El primer paso lo dio Italia cuando prohibió el uso de ChatGPT en el país porque podría estar recopilando datos ilegalmente de sus usuarios y exponiendo a menores a interacciones inapropiadas.
Otros países europeos también han expresado preocupaciones similares, especialmente porque los modelos de inteligencia artificial son particularmente útiles si se entrenan adecuadamente, lo que requiere grandes cantidades de datos.
El creciente papel de la IA en el lugar de trabajo presenta tanto beneficios como preocupaciones, como la privacidad, la equidad y la discriminación. Al adoptar un enfoque proactivo en cuanto a políticas, transparencia y educación, los políticos buscan garantizar que la IA sirva como una fuerza para el bien, asegurando que los modelos de IA sean buenos jefes no es algo que tengan en mente en este momento.
Decrypt-a-cookie
This website or its third-party tools use cookies. Cookie policy By clicking the accept button, you agree to the use of cookies.