Por Stacy Elliott
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El fundador de Ethereum, Vitalik Buterin, pareció reflexionar, si no responder directamente, a una carta abierta de profesionales de la tecnología en la que se insta a los legisladores de Washington a tener cuidado con las criptomonedas.
La carta a la que respondía, publicada el miércoles, estaba firmada por 26 informáticos de gigantes tecnológicos estadounidenses como Facebook, Amazon, Apple, Netflix y Google. El documento pedía a los responsables políticos que cuestionaran la narrativa de que las criptomonedas "son una tecnología innovadora que es buena sin reservas."
Más tarde, esa misma noche, Buterin publicó un extenso hilo en Twitter —casi más largo que la propia carta— en el que decía que le entristecía ver cómo la comunidad de criptomonedas se había vuelto mucho más conflictiva en los últimos 10 o 15 años.
"Una gran diferencia entre la escena del 'nuevo movimiento idealista' de hace 10-15 años y la de hoy es que en aquel entonces parecía posible estar en todos los equipos de los buenos al mismo tiempo", escribió en un tuit. "Hoy en día, el pensamiento es mucho más adverso y conflictivo. He estado tratando de entender... ¿hacia dónde ir?"
Buterin se ha convertido recientemente en la brújula moral no oficial de la comunidad de criptomonedas, analizando los acontecimientos de toda la industria en hilos de Twitter.
En el pasado, ha escrito que se siente en conflicto con el futuro de Ethereum, llamó a las stablecoins algorítmicas "un término de propaganda" a raíz del colapso de Terra, y dijo que desearía que los titulares de NFT del Bored Ape Yacht Club "financiaran bienes públicos".
Buterin llamó específicamente al hecho de que el escritor de tecnología Cory Doctorow había firmado la carta, diciendo que molestó y confundió a mucha gente en la comunidad de criptomonedas porque habían considerado a Doctorow como un aliado. En 2018, Doctorow pronunció su discurso de apertura "Descentralizar, democratizar o morir" en la DevCon, la conferencia anual de desarrolladores de Ethereum.
En uno de los pasajes más condenatorios de la carta, los firmantes escriben que las criptomonedas "seguirán siendo para siempre inadecuadas como base para la actividad económica a gran escala."
Buterin dijo que además de su ruptura con las grandes empresas tecnológicas —o al menos con sus escépticos— la comunidad de criptomonedas también ha tenido que enfrentarse a muchas luchas internas. Sugirió que era un subproducto natural del hecho de que muchos proyectos han acumulado un gran número de seguidores, pero es un fenómeno que todavía le entristece.
"Como mencionó Cory", escribió, aparentemente refiriéndose al discurso de Doctorow en 2018, "las criptomonedas eran al principio solo de entusiastas de la descentralización, pero ahora también hay varios tipos de 'gente de dinero'. Esto es una parte inevitable de hacerse más grande. En los movimientos no financieros también, varias clases de normies y a menudo pronto estafadores se mueven con el tiempo."
Buterin no fue el único que reconoció públicamente la carta.
También atrajo el fuego de Bradley Rettler, un profesor de filosofía de la Universidad de Wyoming que actualmente está escribiendo un libro sobre Bitcoin.
"Cuando escribes un ensayo, necesitas respaldar tus afirmaciones: cuanto más audaz sea la afirmación, más apoyo se necesita", dijo ayer en su propio hilo de Twitter. "Esta carta es larga en afirmaciones audaces y corta en sustento. En resumen, es escandalosamente mala".
El abogado especializado en blockchain Preston Byrne, que trabaja para la firma Anderson Kill, escribió su propio contraargumento, discrepando de la cantidad de esfuerzo que aparentemente se había dedicado a conseguir que la prensa escribiera sobre la carta, la afirmación de que sus firmantes trabajan en campos relacionados con la criptomoneda y luego procedió a calificar hechos de la carta como engañosos o falsos.
"El problema con la regulación de las criptomonedas no es que los dos partidos hayan proporcionado liderazgo de ningún tipo", escribió Byrne, "es que no han hecho nada, que siguen sin hacer nada, y mientras ellos vacilan el mundo se está comiendo su almuerzo".
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